El Rápido Bahía sufrió ayer un auténtico calvario en el primer encuentro de Chini en el banquillo. Los de Aldán encajaron cinco goles en casa del Juvenil de Ponteareas. Los cinco fueron anotados, además, en poco más de media hora de juego.

A partir de ese momento no hubo partido. El técnico del Rápido Bahía aprovechó la segunda mitad, en la que los locales apenas apretaron, para dar oportunidad a varios jugadores juveniles que ayudarán al Bahía a acabar la temporada.

En el primer minuto de juego Guillermo anotó un gol tras una jugada de saque de esquina. En el minuto 18, también de saque de esquina, un despeje de la defensa acabó con una jugada del Ponteareas en ataque que remató Tomás. El tanto fue protestado por supuesto fuera de juego, pero terminó subiendo al marcador.

En el minuto 24 Alexandre se hizo con un balón a la espalda de Fandiño. Exhibió una gran velocidad para quedarse solo y batir a Cristian.

Poco después llegarían dos goles seguidos en sendas jugadas que acabaron con pases de la muerte. Guillermo haría el segundo de la tarde para su cuenta y Carlos redondearía la goleada. Por delante quedaba una hora de juego y el partido estaba ya decidido.

El Bahía, que salió al campo con algún jugador del equipo juvenil como Ferro, dio entrada a más canteranos en la segunda mitad. Nogue, Juan y el portero suplente Tristán tuvieron su oportunidad.

La producción ofensiva del Bahía se limitó a una ocasión de Trejo en la segunda parte que no encontró portería.

Tras el parón por Semana Santa el Bahía tratará de conseguir un buen resultado ante el colista, el Vilariño.