Base Oviedo, Naranco, Barakaldo, Bidasoa, Almoradí, Anaitasuna, Gijón y Torrelavega han disfrutado de este auténtico trotamundos del balonmano español, que ha sabido aprovechar una destacable capacidad de adaptación partiendo del extremo izquierdo que fue en sus inicios, al lateral o a ocupar el centro de la defensa.

- ¿Cómo está siendo su adaptación al Frigoríficos?

- Bien, muy bien. Ha sido fácil adaptarme a Cangas, al equipo, porque he pasado por muchos y ya sé lo que es.

- La única lástima ha sido esa lesión en el rotuliano que le ha impedido estar al cien por cien.

- Sí, es cierto. Se generó en la segunda semana de pretemporada y es más latosa de lo que parece porque remite un rato, después vuelve, y nunca sabes.

- Cuatro puntos antes del parón no parece un mal balance.

- No lo es. Podríamos tener seis pero viendo cómo han ido las cosas tampoco es malo. Los dos ganados al Logroño compensan los que perdimos en Benidorm, así que todo va más o menos según lo esperado. La pena ha sido la eliminación de la Copa del Rey por un equipo de Plata.

- Lo que está claro es que sus opciones pasan por O Gatañal. Dos victorias y ambas ante rivales de prestigio [Logroño y Cuenca].

- La verdad es que se nota mucho el pabellón. Yo ya sabía en qué pista iba a jugar. Al final tienes una sensación rara porque con ese empuje que te da la afición no te das cuenta de lo que estás sufriendo, y cuando te vas fuera lo notas.

- Fueron dos partidos en los que se fue 45 minutos por debajo y al final se remontó por fe y garra.

- Ahí está la diferencia con los encuentros a domicilio. Fuera los rivales se nos van en el marcador y en lugar de agarrarnos nos dejamos llevar. Hay que mantener esa fe porque no nos vamos a ir de nadie con claridad ni vamos a tener partidos relajados.

- Acaba de comentarlo, la lástima ha sido no haber obtenido algún punto a domicilio, especialmente en Valladolid, donde se estuvo a punto.

- En Valladolid sí jugamos hasta el final y en esos momentos cualquier decisión te hace ganar o perder. Estuvimos concentrados, peleamos e incluso nos pusimos por delante antes de lo que acostumbramos.

- Ha habido dos Cangas. Uno, el de los primeros cuatro partidos, muy sólido, y otro tras Granollers, con más dudas. Se veían síntomas de cierto agotamiento, puede que mental.

- Puede ser. Son cosas que el jugador no percibe, no se da cuenta. Fueron derrotas duras y aunque uno quiera resetear siempre quedan en la memoria.

- Ahora, tras el Barcelona, juegan siete partidos de su Liga particular.

- Sí, pienso que podemos pelear todos y aunque en ninguno vamos a ganar de forma holgada, sí son partidos asumibles para poder conseguir puntos.

- ¿El objetivo es alcanzar los 10 para acabar la primera vuelta?

- Marcarse números con lo irregular que está siendo la Liga no tiene sentido porque luego la permanencia puede ir a más. Si pueden ser 14 no iremos a por los 10. Hay que hacer puntos para no pasar apuros a final de temporada.

- El miércoles juegan ante el Barcelona pero el equipo ya piensa en la cita ante el Zamora.

- Sí, es inevitable porque es un rival directo. Ante el Barcelona habrá que hacer un buen partido, me encantaría ganar, pero sería lo más ilógico.

- Pillo habla de que hay que ganar al menos un partido fuera en cada vuelta.

- Y Zamora es una buena opción porque acaba de subir y aún está adaptándose a la categoría. Con los puntos de O Gatañal no será suficiente.