Asegurar la cuarta plaza. Ese es el objetivo del Club Deportivo Moaña en la última jornada de Liga en la Preferente Autonómica Sur, una vez sus opciones de alcanzar al tercero o al segundo clasificados se agotaron el pasado fin de semana. La meta ahora es sumar al menos un punto más, algo que le permitiría afianzarse como cuarto mejor equipo de la categoría y llegar a la cifra de 70 en lo que ha sido una espectacular temporada para un recién ascendido. Pereira, técnico de los moañeses, subraya que “hemos hecho un temporadón y solo puedo quitarme el sombrero por los jugadores. Por eso queremos verlo reflejado el domingo despidiéndonos con victoria y alcanzando la cuarta posición”. La misión es aún más importante habida cuenta de que, señala, “será el último partido de mucha gente en este club”.

La cuarta plaza supondría disputar una de las promociones de ascenso, “que siempre quedará ahí aunque posiblemente no haya opciones reales de subir”. Y es que el Moaña en ningún momento dejó de pelear por acabar en lo más alto. La mejor prueba de ello son los cinco triunfos consecutivos que encadena la escuadra de Pereira. “Sabíamos que era complicado coger al segundo o al tercero, pero siempre creímos en ello. El equipo sigue dando el do de pecho hasta el último momento”, sentencia.

Pese al excepcional rendimiento de los suyos, Pereira se muestra autoexigente y admite que el triunfo del domingo ante el Caselas fue un tanto agridulce por los resultados positivos obtenidos por Arenteiro y Ourense. “Durante un momento nos favorecían los marcadores, con ambos perdiendo, pero al puntuar nos quedamos sin poder subir más puestos. Y es una pena, porque te quedas sin un premio que se merecían los futbolistas”, señala el entrenador. El Moaña mantiene números de mejor equipo de la segunda vuelta, con 39 puntos, los mismos que ha hecho el líder Areas. “Pero al final no es suficiente porque el Ourense lleva once partidos seguidos ganando”, afirma, antes de añadir que “nadie podía contar con estas rachas”.

Pereira lamenta que los suyos se hayan quedado a las puertas de luchar por el ascenso. “Analizando todo, nuestro mayor déficit fue el inicio de Liga, con solo cuatro puntos sumados de los primeros 15. Después sí que conseguimos coger el ritmo en cuanto a puntos”, comenta. Esos comienzos más dubitativos obedecen a la lógica de una plantilla muy renovada, con nueve futbolistas nuevos que precisaban de un tiempo de adaptación. A partir de ahí el Moaña supo afianzar sus bases con una seguridad defensiva encomiable, que le ha llevado a ser el conjunto menos goleado de la competición con 32 tantos en contra, los mismos que ha recibido el Ourense. A nivel ofensivo, los 55 anotados son considerados insuficientes por Pereira, “porque son unos diez menos que los equipos que peleaban ahí arriba”. Los datos apuntan a que el pichichi del equipo, Róber, ha anotado 22, pero que el siguiente en la lista, Yelco, se queda con seis. “Analizamos todo y le damos mil vueltas”, admite el técnico a pesar del gran año completado.