La continuidad en la Tercera División está a tan solo 90 minutos. La victoria del Alondras ante el Ribadumia ha situado al equipo cangués en una excelente posición para poder certificar la permanencia en su siguiente cita liguera, el próximo domingo ante el Céltiga. La escuadra canguesa depende más que nunca de sí misma y un triunfo le permitiría incluso llegar a la última jornada con los deberes hechos y fuera de todo peligro. "Es un partido vital, en el que tenemos mucho que ganar, pero también mucho que perder", asegura Nacho Pacios, que también añade que "ellos se juegan lo mismo, e incluso saben que no perder podría valerles porque en la última jornada tienen un encuentro más asequible que el nuestro".

Las cuentas son bastante claras para los cangueses, que deben dejar por debajo a los cuatro equipos de descenso directo (Órdenes, Dubra, As Pontes y Castro) y a otros dos por los arrastres de Segunda B (Somozas seguro y posible el del Boiro). Si ganan al Céltiga entrarían en la última jornada de Liga con 48 puntos por los 44 de los de A Illa, que ya no los cogerían. El Ribadumia podría llegar a esa cifra (ahora tiene 42) pero el golaverage particular favorece a los rojiblancos. La otra hipótesis que podría darse es la de un triple empate entre Alondras, Ribadumia y bien con Choco, bien con Barco (ambos suman 48 puntos pero deben enfrentarse entre ellos). Y el Alondras también saldría favorecido de esa situación. Ganar, pues, es el pasaporte a la tranquilidad.

"Está claro que si ganamos nos quedamos fuera de toda duda, pero si perdemos nos complicaríamos muchísimo", afirma un Nacho Pacios que advierte de que los mismos cálculos que se hacen en Cangas se están haciendo en A Illa. "Debemos salir con confianza y aprovechar el buen momento de juego en el que nos encontramos", sentencia el preparador de los cangueses.

Nacho Pacios valora el hecho de llegar a las dos últimas jornadas dependiendo de sí mismo, pero recuerda que ya hubo otros momentos en los que se pudo dar ese paso. "Ya pudimos haber salido de ahí ante el Barbadás, Negreira o Deportivo B, en partidos que por unas cosas o las otras no fuimos capaces de sacar adelante. Cuando uno está ahí abajo es por algo, porque en condiciones normales habríamos ganado esos duelos", señala. El técnico apunta asimismo que "esto cambia de una semana para la siguiente" y que lo importante de pelear en la zona baja es "asimilar esta situación. El primero que baja los brazos se hunde. Hay que seguir porque las cosas cambian de un partido a otro. Eso sí, quedan solo dos encuentros y ya no hay tiempo para poder reaccionar".

Nacho avisa de la dificultad del partido del domingo ante el Céltiga. "Será muy complicado porque ellos defienden bien, sacan bien sus opciones al contragolpe y son fuertes a balón parado", indica el entrenador rojiblanco, que habla de la importancia de "llevar el partido a nuestro terreno". La escuadra de A Illa lleva seis jornadas sin ganar (con cuatro empates y dos derrotas) si bien no encaja excesivos goles. Este año ha sumado tantos puntos en casa como a domicilio, donde se encuentra muy solvente. Es el octavo mejor equipo a domicilio, con 22 puntos.