El Frigoríficos del Morrazo ha dado un paso de gigante en su lucha para conseguir la permanencia en la Liga Loterías Asobal al imponerse por 28-31 al Villa de Aranda en el partido disputado esta tarde en el pabellón Príncipe Felipe de Aranda de Duero. La escuadra dirigida por Víctor García, "Pillo", da un golpe encima de la mesa y sale de las posiciones de descenso después de muchas semanas inmerso en ellas. Lo hace en un partido que dominó de principio a fin y en el que mostró tanta madurez como solidez en su juego ofensivo y defensivo.

Los cangueses arrancaron muy fuertes de inicio, marcando las primeras diferencias en el electrónico (1-4, 2-5) frente a un conjunto local que se encomendaba a las acciones en penetración de su central Adrián Fernández. El equipo de Álvaro Senovilla trataba de hacer la goma (5-6, minuto 9) pero al Cangas no le temblaba el pulso y sabía dar el estirón en los momentos importantes, con un juego de conjunto en el que brillaban Moisés y Paulo Dacosta, con Dani Cerqueira fajándose bien en los seis metros. Las distancias se incrementaban (7-13, minuto 25) pero un arreón final de los castellanos apretaba el marcador (12-13) antes de que Eloy Krook anotase el 12-14 sobre la bocina.

La reanudación comenzó con el cara a cara entre Xoán Ledo y Salazar. El cangués le fue ganando la partida a su homólogo y Nikola Potic sacó su poderoso brazo a relucir para machacar sin piedad la portería local (13-18). El joven David Iglesias lucía en defensa y pese a sus esfuerzos, el Aranda no conseguía recortar. Solamente llegó a ponerse a tres goles (21-24) pero Potic y Suso Soliño abortaron la reacción. Luego, tras la exclusión de Pablo Castro a falta de cuatro minutos, los arandinos echaron el resto (26-28). Fueron minutos de nerviosismo, pero nunca pudieron acercarse lo suficiente en el marcador y el Frigoríficos certificó una victoria de tanta necesidad como ilusión. La permanencia está un poco más cerca.