El Domaio ha dado un paso de gigante hacia la permanencia al imponerse a domicilio a un rival directo como el San Martín en un choque que decidió en la segunda mitad. El conjunto que dirige Miguel Villaverde asciende hasta la decimoprimera plaza y adquiere una interesante renta con respecto a los puestos de peligro.

Era un partido para no fallar, en el que la mayor presión recaía en los locales, situados en zona de descenso. El Domaio supo jugar con esa necesidad por parte del rival y esperar agazapado por su oportunidad. Y esta llegó cuando apenas habían transcurrido diez minutos desde el arranque de la segunda mitad, al embocar en la portería Javi un remate.

El tanto reforzó a los moañeses, que mantuvieron su identidad y que no mucho tiempo después se encontrarían con otra buena opción para marcar, aprovechada por Abraham. El duelo se encarriló aún más de lo que estaba por la doble amonestación al local Carlos Sánchez, que derivó en su expulsión. A partir de entonces, el Domaio se dedicó a administrar su renta ante un San Martín que quiso pero no pudo y que acabó cediendo.

El Domaio encadena tres victorias de forma consecutiva y comienza a aclarar un poco más su horizonte en la categoría.