Con el meritorio empate sin goles de este domingo ante el Racing Villalbés, que es segundo, los jugadores del Alondras terminan con sensaciones positivas el año. Sobreponiéndose a numerosas bajas consiguieron neutralizar a un potente conjunto lucense, sumando su cuarto punto en las últimas dos jornadas.

El técnico, Duarte, dio vacaciones a los jugadores este lunes, aprovechando el parón navideño. La plantilla regresará a los entrenamientos el próximo día 26. Sin embargo, la competición liguera no regresará hasta el domingo 8 de enero.

Para no perder ritmo de competición los alondristas tienen planeado un encuentro amistoso el jueves 29 de diciembre ante el Celta B en Barreiro. Los rojiblancos medirán sus fuerzas y cogerán fondo físico ante el filial céltico, que se encuentra en las posiciones de play off de ascenso a Segunda División.

La preparación es importante, pues tras el parón liguero el Alondras tiene por delante una segunda parte del campeonato muy dura, en donde debe trabajar para abandonar lo antes posible los puestos de peligro, pues se encuentra a cuatro puntos del descenso. La jornada del día 8 será precisamente ante el CD Castro, que marca esa línea roja con 18 puntos en su casillero.

Lesionados

El técnico alondrista espera que este respiro de la competición oficial le permita recuperar a jugadores que se encuentran en la enfermería como Pablo Couñago, Yerai y Carminati, para volver a contar con casi todos sus efectivos.