Los equipos de la zona baja de la tabla son la asignatura pendiente del Club Deportivo Moaña esta temporada. El Verín se encargó de ponerlo de nuevo en evidencia en su triunfo del fin de semana en el campo de O Casal, impidiendo a los de Pereira poder situarse algo más cerca de los cinco primeros clasificados. El técnico asume que su escuadra ha perdido demasiados puntos ante conjuntos de la zona baja, algo que se refleja a la perfección en las estadísticas. Los moañeses únicamente han ganado dos partidos ante las escuadras situadas en las diez últimas posiciones de la tabla clasificatoria.

Alertanavia y Polígono de San Ciprián han sido los dos únicos equipos que han caído ante los celestes. En el resto de encuentros, los de Pereira se han ido dejando puntos muy valiosos. Así, han empatado ante Nogueira de Ramuín, Pontellas, Mondariz y Portonovo, y perdido ante Erizana y Verín. De momento, no se han enfrentado con el colista Caselas y con el Grove, decimoquinto clasificado. El técnico de los moañeses asume que "donde más estamos siendo penalizados es con los equipos de abajo", una dinámica con fácil explicación al tener que asumir el mando del partido frente a equipos más replegados. "Asumimos riesgos mayores y cada pérdida de balón es castigada. Exponemos y en esta categoría es algo que penaliza mucho", explica Pereira.

El preparador morracense resta importancia a la derrota ante el Verín, que llegó a Moaña como último clasificado de la Preferente Sur. "Es algo que siempre pasa y que seguirá pasando, aunque no se sabe a qué equipos. De hecho, nos pasó también a nosotros la temporada anterior", dice. "Tuvimos el hándicap de que marcan en el minuto 3 y eso les da un plus mientras que a nosotros, a pesar de tener todo el partido por delante, nos afectó porque quisimos jugar más con el corazón que con la cabeza". Con todo, su mensaje es claro: "Hay que seguir trabajando porque la dinámica del equipo es buena y también tenemos derecho a un partido en el que no hayan salido las cosas", sentencia el preparador.

Con tres duelos por delante antes de que acabe la primera vuelta, dos de ellos ante equipos de la zona baja, Pereira no quiere hacer cálculos de ningún tipo. "Es obvio que nuestro primer objetivo es la permanencia, pero no pensamos en si jugamos con rivales directos o no. Ahora nos medimos al Atios, un equipo difícil, y luego ya veremos el siguiente. Tenemos que pensar solo en el próximo domingo", manifiesta.