De ser uno de los conjuntos más tarjeteados a convertirse en rey del juego limpio. Esa ha sido la transformación sufrida por el Alondras en tan solo un año. De la mano de Jacobo Montes, los cangueses son uno de los equipos de Tercera División que presenta mejores números en deportividad, ya que únicamente han recibido 17 tarjetas amarillas y ninguna roja en las 12 primeras jornadas de competición. "Es algo con lo que les he roto mucho la cabeza. Si nos enseñan tarjetas, que sea porque el juego lo demanda, pero no por protestar. Y en este sentido tengo que decir que estoy muy contento y orgulloso de estas cifras", afirma el técnico.

Montes asume que "era imprescindible dejar de ser un equipo protestón para poder centrarse en el juego. El fútbol ya es lo suficientemente complicado como para que uno esté pensando en otras cosas". E insiste en la ineficacia de esas acciones verbales. "Odio las protestas, porque entre otras cosas no tienen sentido. No he visto a ningún árbitro corregir una decisión porque le protestes. Es absurdo hacerlo". Además, en su filosofía está también el respeto hacia la labor de los colegiados. "Ellos también forman parte del juego y tienen que tomar decisiones en milésimas de segundo. Se equivocan como todos", añade. Y el entrenador del Alondras predica con el ejemplo, ya que es poco habitual que sea amonestado. "Me han expulsado muy pocas veces, de hecho no recuerdo cuándo fue la última. No protesto y no quiero que mis jugadores lo hagan", resume.

El cambio de actitud en la escuadra de O Morrazo obedece a una doble razón. Por una parte, a la insistencia de Jacobo Montes con sus hombres, por la otra, al hecho de que se han incorporado jugadores con menos tendencia a reclamar acciones a los árbitros. "Es de todo un poco. Soy un pesado pidiendo esto y también han llegado nuevos jugadores más tranquilos que contagian a los que son más nerviosos", señala. Y es que las cifras son escandalosas en comparación del año pasado, cuando el Alondras vio 97 amarillas y 14 rojas en toda la Liga. En este campeonato los rojiblancos no han sido amonestados en un tercio de los 12 encuentros disputados (ante Dubra, Compostela, Bergantiños y Rápido de Bouzas). Frente a Castro, Órdenes y Choco solamente se vio una amarilla. Ante As Pontes y Vilalonga se vieron dos y contra Silva y Arosa tres. El choque en el que se recibieron más amonestaciones fue el del Barco, con cuatro jugadores alondristas viendo amarilla. En todo este periodo tampoco ha habido una sola expulsión.

Montes incluso bromea con la escasa recaudación en multas por las tarjetas derivadas de protestas. "Tendremos que renunciar al marisco en las cenas y contentarnos con carne o pescado", señala.