El Servi-Auto Bueu Atlético plantó ayer cara a uno de los gallitos de la categoría, el Rodosa Chapela, que acabó ganando 29-24. El conjunto buenense comenzó mandando en el electrónico, hasta que los locales se pusieron por delante con un 8-7 (minuto 17). El primer tiempo fue muy igualado y al descanso se llegó con un apretado 14-12 a favor del Chapela. El arranque de los chapeleiros tras el descanso fue prácticamente definitivo porque con un parcial de 7-2 en apenas ocho minutos se colocaron con un 21-14.

El equipo de Irene Vilaboa no dejó de intentarlo y se llegó a poner a solo tres goles (24-21, min.52) tras un gol de Curra. Pero un nuevo parcial de 4-0 de los locales volvió a dejar sin opciones al Servi-Auto Bueu Atlético.