Quinto, a solamente tres puntos del liderato y con una única derrota en ocho jornadas. Esos son los impresionantes números que atesora el Alondras en la División de Honor de Juveniles. Después de dos temporadas salvando la categoría en la última jornada, el equipo que dirige Javi Tenorio disfruta de un momento dulce que el técnico explica en el buen ambiente que existe en el equipo. "Tenemos 17 de los 20 chicos de O Morrazo y aparte de jugar al fútbol son amigos, han estado juntos en Mundialitos... Hay muchas ayudas en el campo, se ayudan entre ellos... Al final eso se nota", señala.

Lo cierto es que nadie podía esperarse un arranque de temporada semejante. Mucho menos cuando de la plantilla del año pasado solo se mantienen seis jugadores (Viñas, Luismi, Pastoriza, Xoel, Dani y Bastón), con bajas tan importantes como la del goleador Gabri, ahora en las filas del Celta. Ocho futbolistas subieron desde el equipo B de Liga Gallega (Kevin, García, Dieguito, Javi, Yeray, Ángel, Sergio y Juan) y el puzzle se completó con seis fichajes: Anxo y Manu (Celta), Hermelo y Torres (Lérez de Liga Gallega), Diego (Val Miñor) y Rúa (Coruxo).

La idea también era la de recuperar a jugadores de la comarca en el exilio. "Hermelo es de Cangas y estaba en el Pontevedra, no podía ser. Y Rúa es de Moaña y destacaba en los cadetes del Coruxo. Venía para el B pero al final se ha ganado el sitio", afirma. De los foráneos el caso más extraordinario es el de Diego, que se desplaza cuatro días a la semana desde Baiona para jugar en Cangas. "Todos se involucran", subraya Tenorio, y la mejor muestra es que "media hora antes de entrenar ya hay gente por el campo peloteando".

Futbolísticamente también hay razones de peso para el éxito. Una de ellas es el triunfo del colectivo. El año pasado solamente marcaron cinco jugadores (Viñas, Gabri, Jacobo, Brais y Yeray). Esta campaña, en tan solo ocho jornadas ya hay nueve futbolistas que han visto puerta. "No hay una superfigura que destaque sobre el resto, pero sí tenemos gente más técnica que el año pasado, de uno contra uno, a la que le gusta tener el balón", apunta el entrenador cangués.

Otro de los datos sorprendentes es que el Alondras es a día de hoy el mejor visitante de la categoría. En cuatro partidos ha sumado tres victorias (Compostela, Areosa y Pabellón) y un empate (Marina Sport), precisamente en el partido "que más merecimos ganar", manifiesta Javi Tenorio. Al contrario que otros años, donde sacar puntos a domicilio era una auténtica odisea, en esta los jugadores rojiblancos se están mostrando intratables cuando se alejan de O Morrazo. La única asignatura pendiente de los cangueses es en casa, en donde se estrenaron el domingo ante el Bansander tras cuatro intentonas. "Con el Avilés tuvimos mala suerte, la igualada con el Celta no es como la de otros años encerrándonos y el Val Miñor es cierto que nos sorprendió", admite. Eso sí, resalta que "ahora tenemos que mejorar en casa para tratar de sacar más puntos".