La Sociedad Deportiva Tirán cumplió el guion previsto y finalizó la primera jornada de la Bandera de La Concha en la séptima plaza. No hubo espacio para la sorpresa y los moañeses ocuparon el espacio que, por plantilla y presupuesto, le corresponde entre los grandes del remo citados ayer en aguas de la Bahía de San Sebastián. Con los cuatro trasatlánticos -Bermeo Urdaibai, Hondarribia, Orio y Kaiku- muy por encima de los de O Morrazo, San Juan rindiendo como de él se espera y un Ziérbena que, sin las restricciones que le impone la Liga San Miguel en sus alineaciones, gana mucho potencial, la Mar do Con hizo lo que debía. Y, hoy por hoy, salvo que haya otros condicionantes, su puesto es el séptimo.

Cumplieron con creces los hombres de un José Ángel Cambados, "Truco", al que una inoportuna lumbalgia dejó en tierra. En una calle poco propicia y en la segunda tanda, se defendieron bien en los primeros metros, marcando de cerca a Urdaibai y Ziérbena, y empezando a dejar atrás a La Donostiarra. Al salir del abrigo de la isla las cosas se pusieron un poco más complicadas y los de Bermeo pusieron proa, con Ziérbena detrás y Tirán muy cerca de estos, a veces un segundo por delante, a veces uno por detrás. En la ciaboga la Bou Bizkaia ya gozaba de una renta importante, jugando con la referencia de lo que había hecho Hondarribia pocos minutos antes. Ziérbena viraba a 10 segundos y Tirán lo hacía a 11.

El largo de vuelta fue más duro para los moañeses, que aún así mantuvieron un interesante mano a mano con Ziérbena, manejando además los tiempos que habían hecho antes San Juan y Orio, los dos peores de la primera tanda. David Álvarez buscaba otra calle para optimizar las paladas de los suyos, que seguían marcando de cerca a su rival directo. Sin embargo, el último esfuerzo de los gallegos no tuvo premio y acabaron en la séptima posición, a poco más de cuatro segundos de Ziérbena, a ocho de Orio y a casi 12 de San Juan.

El interés en la regata estaba situado, no obstante, en el duelo entre Hondarribia y Bermeo remando en diferentes tandas. A los primeros les tocó marcar las referencias de inicio, en una regata que los emparejó con Kaiku, San Juan y Orio. Kaiku mandó durante varios minutos aprovechando una salida algo más discreta de la Ama Guadalupekoa. Pero cuando Hondarribia cogió la cabeza la sala de máquinas se puso a pleno rendimiento y los segundos comenzaron a caer de su lado. A ello contribuyó, sin duda, los problemas entre Orio y Kaiku, que bogaban muy próximos el uno del otro, provocando las advertencias del juez de mar. Eso desconcentró por completo a los aguiluchos, que se hundieron poco a poco hasta acabar últimos en su tanda. Mientras, Hondarribia apretaba y marcaba el mejor tiempo.

Con el crono de Hondarribia en mente, Urdaibai cogió impulso en el primer largo y en el segundo marcó un ritmo demoledor que lo llevó a estar hasta con cuatro segundos por encima de su rival. Sin embargo, en la recta final el empuje de los de Bermeo cedió un tanto y la diferencia se quedó por debajo de los dos segundos, lo que augura emoción a raudales en la segunda jornada de La Concha, prevista para el próximo domingo.

Truco se mostró satisfecho por el rendimiento ofrecido por los suyos. "Estuvimos muy bien, en la línea de esta calle, a la que hay que hacer buena. Hicimos un buen largo de ida, y en la vuelta intentamos buscar la ola", relata. Las diferencias, en cambio, se dispararon al paso por la ciaboga. "El primer largo fue bueno, perdiendo entre 7-8 segundos con Bermeo, pero luego tienes que buscar la ola y cambiar de calle para mejorar el rendimiento", señaló, antes de hacer una reflexión. "Todos tienen equipazos y nosotros tenemos lo que tenemos y no hay más", admite. Eso sí, el asumir este hecho no significa, en modo alguno, renunciar a la sorpresa el próximo domingo. "Intentaremos remar como nunca y tenemos una nueva oportunidad para ver si podemos mejorar el resultado", sentencia el preparador.