Nikola Potic llega a Cangas avalado por su lanzamiento de larga distancia, ese que dejó ver de forma puntual tanto en Gijón como en Puente Genil. Pero la idea de Víctor García, "Pillo", es la de que el serbio se aplique también en tareas defensivas, no solo por el hecho de poder explotar los dos metros de estatura del jugador, sino también para poder ahorrarse un cambio ataque/defensa, algo fundamental en un juego de tanta velocidad como el balonmano.

A Potic, lejos de asustarle el reto, le gusta y apuesta por convertirse también en un hombre importante en defensa. "En mi carrera profesional, tanto en el Partizán como en las selecciones, yo jugaba más en defensa. En España solanmente entraba en ataque y muy poco en defensa. Para mí y para el equipo es importante que yo pueda actuar tanto en defensa como en ataque. Es algo que quiero y que necesito mejorar", manifiesta el ya nuevo jugador del Frigoríficos del Morrazo.