La cascada de renovaciones en el Frigoríficos del Morrazo continúa de cara a la temporada 2016-2017. El último en haber aceptado la propuesta canguesa ha sido el portero Edu Salazar, que se ha comprometido con el club morracense por las dos próximas campañas. El meta vigués se convierte de este modo en el séptimo jugador que tendrá a su disposición Víctor García, "Pillo" en el nuevo proyecto del Balonmán Cangas.

La de Edu Salazar era una de las renovaciones prioritarias para el Frigoríficos por ocupar una posición determinante en la que ya causó baja Yeray Lamariano, y por ser un jugador en franca progresión desde que llegó hace un par de temporadas al club morracense. De hecho, y aunque este año ha estado a la sombra del meta vasco, lo cierto es que ha respondido con buenas actuaciones cuando tuvo que asumir la responsabilidad de sustituirlo. La idea del club es que este año pueda dar un paso adelante y competir de igual a igual con el portero que se fiche, que en principio debería ser el brasileño Pedro Hermones, un joven valor de la prolífica cantera carioca. En esta temporada las estadísticas de Asobal le dan al meta del Cangas 107 paradas de 376 lanzamientos, con un 28 por ciento de efectividad global.

Salazar se mostró muy satisfecho por el acuerdo alcanzado y por la tranquilidad de atarse dos años en Cangas. "A mí me pareció bien la idea de firmar dos temporadas, y tengo claro que mi objetivo este año es la titularidad. Quiero competir por ella", afirma. El meta vigués asume que puede ser el año de su explosión definitiva, y quiere aprovecharlo al máximo. "Partimos en igualdad de condiciones. Antes de fichar pregunté qué tipo de portero vendría y para mí es genial que se apueste por un meta joven para poder competir de igual a igual", señala. Así pues, Salazar tiene ante sí el reto de pasar de ser un segundo espada a primer portero. "Es complicado, tal y como me dijo alguna vez Yeray [Lamariano]. Con él tengo mucha afinidad y me dijo que tenía que aprovechar al máximo este año", relata.

La temporada se presenta complicada por las bajas sufridas, algo que tampoco asusta al meta. "El primer año fue increíble y pensábamos que sería irrepetible, y el pasado fue aún mejor. La gente se acostumbra rápido a lo bueno, pero el objetivo siempre es mantener la categoría", afirma.