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balonmano - Liga Asobal

El Frigoríficos se atasca en ataque

El Cangas firmó ante el Sagunto su peor partido ofensivo de los últimos cinco años

David García, en el duelo ante el Puerto Sagunto entre Rubén Ruiz y Ángel Fernández. // S. Álvarez

La luz que iluminó el ataque del Frigoríficos del Morrazo durante la primera vuelta se ha apagado. El conjunto cangués atraviesa su momento más crítico a nivel ofensivo de la temporada, acumulando ya varios partidos en los que su porcentaje de acierto de cara a la portería contraria deja bastante que desear. Si frente a Cuenca, Go Fit Sinfín y en menor medida con Guadalajara y Huesca la puntería fue bastante deficiente, el sábado ante el Puerto Sagunto se batieron récords negativos. "Salvo el primer año en un duelo ante el Barakaldo ha sido nuestro peor partido en ataque de todos estos años", sentencia Víctor García, "Pillo".

Los números así lo corroboran. Los cangueses anotaron 21 goles, pero con un porcentaje de acierto del 43 por ciento. Y es que hubo hasta 28 errores en el tiro (21 paradas de Bruixola, tres blocajes, dos postes y dos lanzamientos fuera). "Nuestro nivel de finalización no estuvo mal, porque hicimos 49 disparos, los números en los que solemos manejarnos, pero no es normal fallar tanto. Estamos teniendo un problema grave con el lanzamiento", reflexiona el entrenador del cuadro cangués, que ha buscado la solución por distintas vías. "He estado semanas trabajando el lanzamiento, otras sin hacerlo para soltar la mente y otras con un sistema intermedio, pero sin éxito", admite.

La defensa del Cangas, salvo errores en la segunda mitad del encuentro, rindió a buen nivel. Al igual que la portería, en donde Lamariano se situó en un 36 por ciento de efectividad. "Estuvo bien, y con esos números es complicado perder, pero....", señala Pillo. El técnico habla de que su equipo sufre un "bloqueo mental brutal", que se acrecienta al no atravesar determinados jugadores su mejor momento de juego. "Este es un equipo en el que tenemos que jugar al límite de nuestras capacidades, y cuando uno o dos hombres no están bien lo notamos", advierte.

A todo ello se unen las limitaciones de una escuadra que a pesar de su prodigiosa primera vuelta tiene evidentes limitaciones marcadas por su presupuesto. El Puerto Sagunto, con muchos centímetros en defensa, se ancló en 6 metros y dificultó las maniobras locales. "Si Adri no está fino tenemos problemas porque no contamos con lanzamiento exterior. Aún así generamos muchas situaciones claras pero luego fallamos los tiros", afirma.

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