El campo de A Granxa tiene la clave. El Domaio fía a él sus opciones de poder finalizar la primera vuelta en una mejor situación tanto a nivel clasificatorio como de puntos. Por su terreno de juego pasan las dos próximas citas en Liga, la primera de ellas el domingo frente al Estradense y la segunda el siguiente fin de semana ante el Mondariz. Faltaría un choque para rematar la primera vuelta de la competición, ante el Caselas, pero este quedaría ya para el mes de enero.

El entrenador del conjunto moañés apunta la importancia de disputar dos encuentros de forma consecutiva en casa y se marca un objetivo asumible. "El objetivo es conseguir al menos cuatro puntos. Pensar en seis sería genial pero con nuestra trayectoria cuatro estaría muy bien", afirma. El Estradense llegará como tercero de la Liga, con los mismos puntos que el segundo, mientras que el Mondariz ocupa actualmente el octavo puesto. La idea es cerrar la mitad de la competición liguera con 20 puntos -la escuadra tiene ahora 14 con tres partidos por delante-, un balance que el técnico asume que no es excesivamente alto. "Son pocos puntos pero seguramente tendremos que luchar por acabar con unos 20 puntos. Así la meta será la de llegar a los 45 al final de temporada, que será donde se sitúe más o menos la salvación. Después todo dependerá de los arrastres, como siempre", señala Estévez.

Con todo, la primera preocupación de los moañeses es la de frenar la sangría de goles que lo convierten en el segundo equipo más batido de la categoría con 34 dianas en 16 encuentros, solamente superado por el colista Monterrey. "Con el Céltiga también regalamos el gol, no de forma escandalosa pero sí que lo hicimos. Fue una derrota injusta porque en el primer tiempo tuvimos tres ocasiones clarísimas y en el segundo llegamos menos pero tuvimos la posesión", explica el preparador de los de O Morrazo.

Estévez asume que hay que mejorar atrás, especialmente porque "somos un equipo que tira mucho hacia arriba, y nos cuesta movernos en los cambios ataque/defensa. No cambiamos con rapidez el chip para achicar en defensa. Nos han marcado goles de acciones en que nos cortan el balón o tras un saque de banda por no ser capaces de recuperar y activarnos de nuevo en defensa". De hecho, en las últimas jornadas Estévez ya ha apostado por alguna variación táctica, por sujetar un poco más al equipo atrás. "Ya hemos comentado de presionar un poco más arriba y de apretar si hay pérdidas de balón para evitar contragolpes. En estos partidos ya estamos viendo el fútbol de atrás para adelante".