Lamariano se muestra satisfecho de la estrecha colaboración que ha establecido con una defensa que vuelve por sus fueros, que rinde a buen nivel independientemente del sistema utilizado. "Es un equipo que lleva mucho tiempo jugando junto y las premisas son muy claras, independientemente del sistema defensivo: agresividad, contacto y blocaje", señala, antes de añadir que "el problema lo tienen los equipos contrarios, porque les cuesta mucho adaptarse a esos cambios defensivos".

El meta asegura que "contra determinados jugadores prefiero más que lo toquen o que hagan blocaje, pero si defendemos así me da igual el sistema. Con el 3.2.1 hay más lanzamiento de los extremos y depende de cómo estés tú en ese momento de la temporada, pero en principio, con esta agresividad, me da igual la defensa".