El Beluso se impuso por 2-0 al Nigrán en un partido que le sirve para situarse en la zona tranquila de la tabla clasificatoria de Primera Autonómica después de haber aplazado su encuentro de la semana pasada ante el Campolameiro. La escuadra que dirige Marcos Torres supo adaptarse al juego físico que propuso el equipo visitante, y resolvió en el primer tiempo gracias al acierto de cara al gol mostrado por Róber y Adri.

Con una convocatoria en la que por vez primera no había juveniles y en la que entraban hombres como Moital, el Beluso se manejó con soltura en un choque sin grandes alardes técnicos pero con mucho ritmo. Los locales avisaron con un lanzamiento al palo y poco después Róber transformaba el 1-0 tras una jugada de estrategia. Muy poco después Adri sentenciaba en un disparo escorado con muy poco ángulo.

Ya en la segunda mitad el Nigrán subió líneas y trató de achuchar a los locales, que entonces vivieron del contragolpe. Miguel pudo sentenciar al quedarse solo en un mano a mano ante Pablo Míguez, que detuvo su disparo. Y Manu desperdició otra ocasión al enviar el balón por encima del larguero. Al final, no hubo más y el Beluso amarra tres puntos importantes para su objetivo de la permanencia.