Con la crisis económica golpeando sin contemplaciones al mundo del deporte, y en especial, al de la vela, la financiación para poder acudir a las regatas continúa siendo una de las principales preocupaciones para los regatistas, por encima incluso de la preparación deportiva. La única competición para la que parece tener ya todo asegurado Andrés Álvarez es el Campeonato de Europa Juvenil, tal y como él mismo explica. "Los tres primeros juveniles forman parte de la selección española y se les paga prácticamente todos los gastos", señala.

No es así en las otras dos competiciones. En el Mundial Absoluto la Federación Española abona únicamente la inscripción, por lo que desplazamiento y estancia correrán a cargo de los propios deportistas. Y en el Mundial Juvenil ISAF hasta el año pasado la subvención dependía de los resultados obtenidos. "Los que hacían podio tenían asegurado todo, desplazamiento, dietas e inscripción", apunta.

Sin regatas importantes en el horizonte, los regatistas se centrarán en los entrenamientos y apuntan ya hacia Portugal. "Queremos ir pronto a Portugal para probar bien el campo de regatas", señala, antes de añadir que "también hemos de probar el material, porque todos iremos con el mismo". Una aparente ventaja que se convierte en desventaja. "Hay regatistas que llevan usando el barco y las velas de esa marca durante dos años, por lo que tendrán ventaja sobre nosotros", afirma. Lo que está fuera de dudas es la compenetración de Álvarez y Rodríguez. "Fuera del agua tiene que haber compañerismo y dentro mucha comunicación", resume el buenense.