El segundo equipo del Balonmán Cangas asume este año el nombre de Luceros Cangas, en homenaje al primer equipo que practicó este deporte en el municipio. Así, con este gesto simbólico, arranca un nuevo proyecto que tiene por objetivo la permanencia en Primera Nacional, pues el año pasado descendieron y recuperaron la plaza gracias a un cambio de formato en la competición. Ayer se presentaron de forma oficial en el entorno de la alameda vella, justo en donde disputaba sus encuentros el histórico Luceros.

El equipo estará dirigido desde el banquillo por Miguel Santorio, quién destacó la calidad de la plantilla y apunta a que tratarán de "mantenernos sin problemas y no sufrir hasta el final" Aunque no olvida que el objetivo principal es que sus jugadores ayuden y se consagren en el primer equipo. "Cuanta más gente llegue arriba mejor", sentencia.

Este domingo, a las 12.30 horas, debutan en competición liguera con una plantilla de 15 fichas. Las bajas de larga duración de Hugo -que combinaría el filial con el primer equipo- y de Josemi, suponen un contratiempo. La plantilla es corta y no descartan fichar a algún extremo más, "pues Ángel, Pumar y Menduíña subirán al primer equipo en bastantes ocasiones". Sin embargo el míster asegura estar "contento" con el equipo, con dos jugadores importantes por puesto. "La plantilla nos permitirá competir a buen nivel también cuando no estén todos disponibles, además completaremos las convocatorias con jugadores del juvenil".

La carta de presentación del Luceros Cangas será un balonmano basado en la "velocidad. Queremos defender bien e intentar correr arriba", señala Miguel Santorio.

Las nuevas caras, que deben dar un salto de calidad al conjunto, son las del portero Eduardo Salazar, el extremo Iván Antonio Soage, el lateral derecho David Barreiro, y el extremo Ángel Iglesias.

Del nuevo guardameta, que competirá por el puesto con David Lagoa, el técnico destaca su "buen nivel y actitud". Es un guardameta joven que procede del Seis do Nadal y ya formó en las categorías inferiores del Octavio.

David Barreiro, por su parte, regresa a la disciplina del Cangas tras dejar el equipo por motivo de estudios. Iván Antonio Soage ya entrenó con el filial cangués la temporada pasada. Este año entró en el equipo. Por su parte, Manuel Ángel Iglesias es un jugador zurdo, que procede del OAR Coruña e incluso jugó en las categorías inferiores de la Selección española. Ya está totalmente recuperado de su lesión de menisco.

Todos ellos llevan preparando la temporada desde el 5 de agosto, cuando iniciaron los entrenamientos. "Nos vino bien una pretemporada larga porque había que conocer bien al grupo, pero ya se notan las ganas de empezar a competir", desvela el entrenador.

No oculta que competir con el histórico nombre de Luceros Cangas es "especial, porque representa el origen del balonmano en la villa, es ilusionante", concluye.

A partir del domingo el futuro del Frigoríficos empezará a mostrar su verdadero nivel.