Celta, Porriño, Ponte Ourense, Grove, Choco, Nigrán y Alondras, la que al final fue su casa, jalonan la trayectoria de Nando. A sus 38 años de edad, el portero decide colgar las botas, y lo hace desde la titularidad y el agradecimiento al club.

- ¿Por qué ha tomado esta decisión?

- Con el paso del tiempo uno se da cuenta de que su ciclo llega a su fin. Es más por cansancio psicológico que físico, porque creo que hubiese podido aguantar un par de años más.

- Lo deja siendo titular y considerado por muchos compañeros de profesión como uno de los mejores metas de Tercera.

- Que los demás valoren tu trabajo siempre gusta, aunque creo que hay muy buenos porteros en Tercera. Pero los años van pasando y aunque me apetece seguir vinculado al fútbol, quiero que sea de otro modo.

- Lo deja tras una temporada que se preveía complicada, pero quizá no tanto como fue.

- Hicimos una primera vuelta maravillosa, pero después se produjo la marcha de Andrés, lesiones de larga duración y al final llega la desconfianza. Jugadores con menos veteranía han aportado cosas pero han tenido una responsabilidad que no debía recaer en ellos.

- Esos jóvenes han ganado experiencia.

- Sí, el saber salir de una situación complicada. El año anterior tuvimos todo a favor de corriente y en éste gente joven tuvo que invertir una situación difícil.

- Han sido siete años en Cangas que habrán dejado huella.

- Con respeto al resto de equipos en los que jugué, el Alondras es el club de mis amores, donde más he disfrutado jugando al fútbol. Me he sentido identificado con la entidad, la afición, los compañeros. Ha sido uno de los mejores vestuarios en los que he estado.

- Deja tras de sí a un portero de mucho futuro como Martín.

- Es un chico fantástico, muy responsable y tiene unas condiciones maravillosas. Creo que el Alondras tiene con él portero para muchos años. Es muy trabajador y tiene que llegar el momento en el que el fútbol le devuelva lo que corresponde.

- Queda un equipo con una buena base de veteranos con Leiro, Andrés o Mauro y una buena camada de jóvenes.

- Hombres como Leiro, Mauro o Andrés han asumido un nuevo rol que no tenían y han ganado peso en el grupo. Lo han hecho bien y el año que viene tendrán una reválida. Y futbolistas como Denís darán un nivel más alto.

- Se hace difícil pensar que su futuro no vaya a pasar por el fútbol, aunque sea desde otro ámbito diferente al de jugador.

- Quiero formarme. Tengo el nivel I de entrenador, quiero seguir y cuando lo haga coger un equipo o ser ayudante. Este año ha sido duro psicológicamente y quiero tomarme las cosas con más tranquilidad.

- ¿Cuál es su recuerdo más positivo? ¿Y el más negativo?

- El más positivo fue la última fase de ascenso, en un año redondo con un grupo humano increíble. El peor cuando me comunicaron mi baja en la anterior etapa en Cangas.