Su retorno a Cangas mañana con el Compostela queda un tanto oscurecido en una semana convulsa en la que se produjo la dimisión de José María Rial y la contratación de José Curiel como sustituto. Alfredo Álvarez, "Fredi", regresa a un O Morrazo en el que apenas hace unos meses vivió la gloria, con la presencia en la fase de ascenso, y la decepción, tras quedar eliminado por el Racing B.

- Será un partido con sensaciones muy diferentes al de cualquier otro.

- Es lógico, no podía ser de otra manera. Es un partido especial que estoy deseando que llegue, y que afrontaremos con la firme intención de ganar.

- Llega en una semana complicada, con cambio de entrenador incluido.

- El panorama para el Alondras no ha sido el mejor por circunstancias, pero el fútbol tiene estas cosas. De lo que estoy seguro es de que el Alondras está capacitado y a partir del lunes ojalá todo le vaya bien.

- ¿Cómo se han visto los acontecimientos desde fuera?

- Los he vivido casi de primera mano porque yo sigo trabajando y viviendo aquí. Es un equipo nuevo y se sabía que sería un año complicado. Desgraciadamente el proyecto de José María no ha salido, muy a mi pesar, pero espero que sea lo mejor para el equipo.

- La directiva hablaba que con la llegada de Curiel se esperaba recuperar un estilo similar al que había con usted y con Juan Carlos Andrés.

- No lo sé. Es algo que debe valorar el club para saber si es el hombre indicado. Creo que sí compartimos una idea parecida del fútbol. Nos une una amistad y hablamos a menudo. Espero que salve la categoría y pueda iniciar un proyecto propio la próxima temporada.

- ¿Cree que el Alondras se salvará?

- No tengo la menor duda. El equipo está capacitado, pero el fútbol es caprichoso. El año que descendimos lo hicimos después de haber jugado la fase de ascenso y con la misma plantilla y entrenador. A veces la pelota no entra. Pero creo que el equipo saldrá de esa situación porque conozco a los futbolistas.

- Ha conseguido meter al Compostela en las primeras plazas pero les está costando mucho mantenerse ahí.

- Cogimos al equipo con un déficit de puntos y confianza con respecto a otros. Dimos un salto importante en los tres primeros meses, con 11 jornadas consecutivas sin perder, y nos metimos rápido arriba. Pero pasa lo de siempre, que llegar es más sencillo y mantenerse complicado. Ahora quizá hay más miedo a perder lo que tenemos. De todos modos, hemos recuperado la buena línea.

- ¿El hecho de que haya cambiado tanto la plantilla y haya llegado un nuevo entrenador hace que no influya tanto su conocimiento del Alondras?

- Desde luego. Conozco a los jugadores con sus virtudes y defectos, pero no sé cómo va a plantear el partido el nuevo entrenador. No tengo ninguna referencia y la dificultad es máxima. Ellos están muy motivados.

- El 8-3 de la primera vuelta es otro factor de motivación para el Alondras.

- Es uno de ellos. Ese resultado no se olvida de un día para otro. Pero también influye el cambio de entrenador, ya que todos quieren agradar. Y el tercer aspecto es que llegamos Fuchi (segundo entrenador) y yo y quieren ganarnos. Intentaremos que todo esto se vuelva en su contra.