El central zurdo internacional Pablo Cacheda González (Lalín, 1992) comunicó ayer en una multitudinaria rueda de prensa que abandona el balonmano profesional después de militar en clubes de la máxima categoría española como Academia Octavio (2011-2013), Balonmano Valladolid (2013-2014) y Naturhouse La Rioja (2014-2018). Cacheda estuvo arropado por familiares, autoridades municipales y una amplia representación del Balonmán Lalín, entidad donde dio sus primeros pasos como jugador. El deportista lalinense inició su comparecencia pública recordando que ayer se ponía fin "a un sueño que empezó hace 20 años", pero que 554 días después de su fatídica lesión de rodilla frente al Balonmán Cangas, "dos operaciones y una larga rehabilitación", su cuerpo "dijo no" a una posible recuperación para la práctica del balonmano. El central fue incapaz de contener la emoción en varios momentos de su parlamento, rompiendo a llorar en medio de la ovación de todos los presentes, lo que no le impidió poder leer las líneas que traía preparadas para la ocasión.

Pablo Cacheda aprovechó la cita para recordar y agradecer a todos los que le ayudaron en su carrera deportiva. El central se acordó de manera destacada de su familia, "amigos y hermanos como Javi González, Ángel Fernández, Pedro Rodríguez y sus novias y familiares", el Ciudad de Logroño, Jota González, el Academia Octavio y su técnico Quique Domínguez y, por último, Aser Pereira y Alberto Mouriño, que le ayudaron en su reciente y complicada tarea de rehabilitación. Como no podía ser de otra forma, Cacheda tuvo una especial mención para el Balonmán Lalín "porque me inculcó unos valores, me formó y ahora me ha vuelto a acoger". Cacheda indicó, también, que "espero haber estado a la altura porque lo he intentado" y manifestó su intención de "transmitir a los que empiezan lo bonito que es el deporte del balonmano". La intervención del central dezano fue seguida con mucha atención y respeto por todos los presentes, que sólo la interrumpieron cada vez que Pablo Cacheda sucumbía a la emoción. En especial sus padres, Sofía y Jesús, y su hermana Cecilia, que tampoco pudieron aguantar las lágrimas durante la conferencia de prensa cada vez que el balonmanista lalinense se veía obligado a interrumpir su discurso debido a los sollozos.

Técnico de la base

Pablo Cacheda quiere seguir matando el "gusanillo" vinculado al que fue su club de toda la vida. "Me gustaría seguir ayudando en todo lo que pueda", indicó ayer el que este año fue ayudante de Diogo con el equipo juvenil del Balonmán Lalín. Precisamente, uno de sus jugadores, Brais González, le hizo entrega de una camiseta del club con su nombre al término del acto. Además, la directiva de la entidad, Nuria Rodríguez, también obsequió al jugador con un recuerdo en nombre del Balonmán Lalín. Cacheda se despidió diciendo que para él lo mejor de haber jugado al balonmano fue "conocer a mucha gente importante, debutar en la Champions y los partidos con España". En este sentido, cabe recordar que el central fue internacional 32 veces júnior (93 goles), 43 juvenil (121 goles) y 5 en promesas (20 goles). Además, se proclamó subcampeón del Mundo y de Europa juvenil, y campeón de Europa júnior en Bosnia, donde también fue nombrado mejor central del torneo.

El alcalde de Lalín, Rafael Cuiña, le puso el broche de oro al emotivo acto recordándole a Pablo Cacheda que "estamos muy orgullosos de ti porque ya eres todo un referente del deporte de este pueblo".