El jugador brasileño Beto llegó a A Estrada en el verano de 2006. Con su presentación se ponía punto y final a un idilio que había comenzado años antes. "Lo vi jugar un partido contra el Lobelle cuando estaba en el Burgos", explica el por entonces presidente del Reale Seguros A Estrada Fútbol Sala, Manuel Sanmartín. "Fuera a ver el partido con Rodrigo Feijóo, que era el entrenador del equipo de A Estrada. Yo todavía no era presidente pero tenía en la cabeza que podía serlo. Recuerdo que ese día le dije a Rodrigo que algún día iba a fichar a Beto para nuestro equipo".

La predicción de Sanmartín se cumplió tiempo después. Tras una temporada en el Avilés, Beto vio con buenos ojos la propuesta que Sanmartín y el Reale le presentaban desde A Estrada pero el conjunto asturiano, con quien tenía contrato, no quería dejarlo marchar. "Nos ponían muchas pegas, así que Pepe Sesar y yo cogimos el coche y nos fuimos a Asturias. Volvimos con una multa por exceso de velocidad pero con Beto fichado", recuerda Sanmartín. "Fue la primera y única vez que el club pagó dinero para fichar a un jugador". 2.780 euros trajeron a Beto a A Estrada, de donde nunca se marchó.

El brasileño no firmó un buen año en una temporada en la que la falta de aclimatación y los problemas personales le pasaron factura sobre la pista. Beto se fue después a otros equipos gallegos pero desde A Estrada, en donde encontró una nueva pareja y un trabajo al margen del fútbol sala. En la villa estradense hizo grandes amigos, personas que en el día de ayer lloraban su pérdida.

Entre esos "amigos" se encuentra el que fue su equipo mientras las fuerzas le permitieron vestirse de corto, el Estradense Veteranos de Fútbol. Allí labró una amistad especial con el emblemático entrenador y jugador del Estradense, Víctor Lomba, para quien siempre tuvo palabras de agradecimiento. Desde el club anunciaron que esperan organizar un acto recuerdo a Beto en los próximos días.

El Estradense Veteranos perdió a uno de los suyos, el fútbol sala nacional a un referente y A Estrada a un vecino diferente. Aquel que decidió cambiar su Brasil natal por un lugar entre los montes estradenses.