Lalín tiene desde ayer un nuevo campeón del mundo de BTT-Maratón. El jefe de filas del Extol-La Gramola-Team, Javi Busto, subió a lo más alto del podio del campeonato continental celebrado en la localidad de Svit, en Eslovaquia, dentro de la categoría Máster. Busto, que decidió acudir a la cita a última hora y de manera apurada, fue capaz de superar un largo y exigente recorrido que se vio endurecido por el barro. Su esfuerzo terminó con recompensa, con una victoria que el propio ciclista dezano calificó como la más importante de su carrera.

Solo unas horas después de terminar la carrera, Busto responde al teléfono justo antes de tirarse a descansar. "Fueron seis horas y veinte minutos muy duras", explica mientras intenta organizar todo lo sucedido desde el pasado jueves, a partir de una decisión que llevaba tiempo retrasando. Finalmente, el ciclista dezano decidió dar un paso adelante y embarcarse en esta loca aventura junto a su mecánico de RG Bikes, Rubén. Los dos viajaron hasta Madrid para coger el vuelo a Bratislava y de allí en coche hasta la localidad en la que se celebraba el campeonato. Fue un viaje largo, cansado y de noche, algo poco aconsejable antes de tener que afrontar un Campeonato de Europa que se ya amenazaba por su dureza.

"Fue una aventura. El jueves por la mañana todavía no sabíamos si íbamos a venir. Arrancamos a última hora. Coches, vuelos... menos mal que cuando llegamos conseguimos dormir y descansar bien. Pasar una noche sin dormir dos días antes de un campeonato así no es bueno", explicó el ciclista dezano, quien al día siguiente descubrió la dureza de lo que le esperaba. "Fue de locos todo lo que se montó. Frío, lluvia, barro... Era como estar en febrero", relató Busto para explicar las condiciones en las que se disputó la carrera. "Fue una salvajada. Eran 134 kilómetros, más de lo habitual en este tipo de carreras, y además tenía más de 4.000 metros de desnivel acumulado. Si a eso le sumas el barro...".

En esas condiciones arrancó una carrera que sorprendió por su planteamiento. La organización decidió separar a los élites de los máster. Eso cambiaba la estrategia de inicio. "Normalmente en estas carreras corres con los élites, así que el objetivo es mantener el ritmo de los mejores lo máximo posible. Si lo haces sabes que vas a quedar entre los mejores Máster", explicó Busto. Sin los élites y tras varios kilómetros de tanteo comenzó una subida que realizó la primera selección. En ese momento fue el lalinense el que decidió "probar" a los compañeros en el grupo de cabeza. Su ataque en una de las partes más duras dejó a solo tres corredores en cabeza, incluyéndolo a él.

Un nuevo tramo duro realizó una nueva selección dejando solo a Busto con un rival, que además no era de su misma categoría. Mientras su compañero era Máster 30, él competía en Máster 35. Eso hizo al dezano cambiar de planteamiento. "En un tramo de bajada con mucho barro él empezó a arriesgar mucho, así que decidí asegurar la victoria. A partir de ahí mantuve la distancia con mis perseguidores hasta el final", relató.

El corredor del Extol-La Gramola Team reconoció que no se había esperado una victoria así. "En un Europeo nunca sabes qué te vas a encontrar. Hay italianos, rusos, alemanes, checos... La gente que viene es porque está preparada y se ve con opciones. No vienes hasta Eslovaquia si no es para estar delante, así que podía pasar de todo".

Busto no dudó en calificar este triunfo en el Europeo como el más importante de su carrera. "Es la victoria más importante. Puede que recuerde otras que me hiciesen más ilusión o a las que le tenga cariño pero ninguna tiene la repercusión de ganar un Campeonato de Europa", afirmó.