El campo de fútbol Salvador Otero, en la Illa de Arousa, acoge hoy la final de la décima Copa de Fútbol Deputación de Pontevedra que se disputarán el Estradense y el Choco. El encuentro comenzará a las 21.15 horas y cuenta con entrada gratuita. Además, también será retransmitido por streaming en la página web de la Deputación de Pontevedra, www.depo.gal. Los aficionados rojillos que deseen acudir a esta cita pueden hacerlo con los autobuses que el Estradense pondrá a su disposición. Estos tienen previsto salir a las 20.00 horas de la estación de autobuses de A Estrada.

El equipo dirigido por Javi Touriño buscará ante el Choco su primera victoria en la Copa Diputación. Los rojillos nunca habían llegado tan lejos en esta competición. En esta ocasión sin embargo, fueron capaces de derrotar a tres rivales de Tercera División, Alondras, Villalonga y Céltiga, para colarse en el partido decisivo. Los de Touriño intentarán ahora realizar una nueva gesta ante un rival que terminó décimo en una categoría superior a la suya.

"Estamos ante otro rival de gran nivel, un equipo que en los últimos años disputó fase de ascenso. De medio campo para arriba son muy peligrosos. Además, son un equipo muy compacto y que lleva tiempo jugando unido", afirmó el entrenador de los rojillos al tiempo que destacó la calidad de jugadores con Gabi Misa, Óscar o Silva, entre otros. Una vez en la final, Touriño auguró que su rival podría cambiar su forma de jugar en copa, en donde ha estado dando minutos a jugadores menos habituales.

El técnico se mostró sin embargo más preocupado por el estado de su equipo, condicionado de nuevo por las bajas. Arnejo, Astray y Jorge son baja segura. Martín sufre una fuerte contractura y podría jugar infiltrado. Rafa y Chan arrastran molestias. "Sabemos que va a ser complicado pero estamos preparados para sufrir. Intentaremos seguir nuestro plan y veremos si nos llega la gasolina hasta el final. Es algo que nos está costando pero es normal a estas alturas. Muchos de mis jugadores llevan más de 3.000 minutos de juego esta temporada. Están fundidos", manifestó.

Touriño, que, tal y como anunció, podría vivir su último partido como entrenador del Estradense, reconoció que esta final de copa es un bonito premio para el equipo tras un año de duro trabajo. "Me gustaría dedicarle un triunfo a la antigua directiva. Hicieron una gestión de sobresaliente y sería bonito despedirlos regalándoles un título como este", afirmó.