La Agrupación Estudiantil ha decidido dar continuidad al largo litigio que mantiene con los diferentes estamentos del fútbol y del deporte gallego por el partido que disputó en la segunda jornada de liga ante el Arzúa y en el que reclama una alineación indebida de un jugador rival. Tras agotar sus opciones en los comités de competición de la federación de fútbol y en el Tribunal de Xustiza Deportiva, el club ha decidido acudir a la única vía que le quedaba, la judicial. Según explicó el dirigente, Arturo Fandiño, han interpuesto una denuncia contra la Federación Gallega de Fútbol y la Secretaría Xeral de Deportes por lo que entienden es "un atropello" contra el club.

"Es una decisión que tomamos antes del último partido ante el Viveiro. Somos un equipo del rural y humilde pero como directivos que somos tenemos claro que vamos a defender a este club hasta el final", afirmó Fandiño, quien se mostró convencido de que tienen la razón en este caso. "La federación terminó dándonos la razón. Ese jugador no podía cumplir su sanción en el partido de copa porque es una competición amistosa, que incluso organiza una empresa privada. Si llegamos a ver que no tenemos razón lo habríamos dejado hace tiempo pero estamos convencidos de que la tenemos", añadió.

"No tenemos nada en contra del Arzúa, lo único que pedimos es que se haga justicia. Dije el día que me eligieron presidente que iba a defender este club como si fuese una empresa mía y es lo que estoy haciendo. Lo que pedimos es respeto. Estoy seguro de que si fuésemos un club con más nombre o si fuésemos de un pueblo grande esto ya estaría arreglado. Somos un club pequeño pero merecemos el mismo respeto que los demás".

La decisión del Estudiantil de acudir a la justicia ordinaria abre un complicado escenario para la federación. La decisión de los juzgados se demorará previsiblemente varios meses, por lo que podría darse el caso de que fallen a favor del Estudiantil con la temporada iniciada. Si ocurre eso, el club recibiría tres puntos más, lo que lo situaría como campeón de la Preferente Norte y tendría que tener una plaza en Tercera en la temporada 2018-19. "Era mejor una solución rápida porque podríamos llegar a ser un nuevo caso Obradoiro", manifestó el dirigente, quien reconoció que sería una situación complicada para la federación y para el club.

A los de Gelucho les queda sin embargo una bala para subir a Tercera sin llegar a este punto, ganar el play off de terceros contra el Arenteiro y aguardar por un ascenso a Segunda División B del Rápido de Bouzas.