- ¿Cómo ve las dos jornadas que tienen por delante, este fin de semana contra Calasancias en A Coruña y en la última jornada contra Burela en casa?
- Las veo complicadas, principalmente la de A Coruña. Es un partido que tenemos que jugar fuera de casa, sin el apoyo de nuestra gente. Será difícil ganar pero vamos con muchas ganas al saber que tenemos opciones. Estamos preparando bien los partidos. Entrenamos ayer y lo haremos otra vez hoy. Ahora ya sabemos cómo juegan y eso nos ayuda a la hora de intentar adaptarnos a ellas. Veremos lo que damos hecho.
- A priori sí que parece una meta complicada. Tienen que ganar dos partidos, los mismos que han ganado a lo largo de toda la temporada.
- Efectivamente. Esta liga es muy complicada. En el grupo sur hay además equipos más fuertes que en la norte, con lo que se nos hizo muy difícil. En esta segunda fase ya nos encontramos con equipos que se parecen más a nosotras en nuestra forma de jugar pero perdimos algunos partidos que no teníamos que perder. Eso es lo que nos está pasando factura ahora y lo que nos deja en esta situación tan apurada.
- Parece poner la atención en el partido contra el Calasancias más que en el posible cara a cara final con el Burela.
- Sí, porque contra el Burela perdimos de menos. Perdimos de tres y entramos en los últimos minutos ganando nosotras. Fue un partido que se nos fue al final. Después de ese partido y jugando en casa lo veo más asequible. Contra Calasancias perdimos más claro y en nuestra casa. Es cierto que ya no se juegan nada porque están descendidas. Eso puede jugar a nuestro favor o no. A veces cuando estás sin presión juegas mejor. Ellas no tienen nada que perder. Somos nosotras las que nos jugamos más y nos podemos poner nerviosas.
- Hablamos en todo caso de un escenario en el que el Burela pierde esta jornada con el líder. Si vencen ese partido ya no tendrán opciones en la última jornada.
- Es cierto, pero confiamos en que pierdan. Está claro que puede pasar de todo pero debería ser así porque juegan contra un equipo que ganó todos sus partidos.
- ¿Contaban con tener esta oportunidad hace quince días?
- No, para nada. Yo, viendo como fue la primera fase, ya lo veía complicado. Es cierto que durante el primer tramo pedíamos calma y hablábamos de la fase de descenso como el objetivo. Cuando llegamos a esta segunda fase sin embargo los resultados tampoco llegaban. Fue un poco desmoralizante pero cuando ganamos el último partido y vimos que teníamos todavía opciones fue una sorpresa para todas. No nos lo esperábamos para nada. Antes del último partido pensábamos que ya estábamos descendidas. Verse a estas alturas con opciones de salvarse está genial pero también da un poco de miedo.
- ¿Necesitan un cambio de mentalidad?
- Sí, tenemos que pensar que podemos hacerlo. Si apretamos un poco en estos dos partidos que nos quedan somos capaces de conseguirlo.
