El Estradense encajó el pasado domingo una dolorosa derrota en su cara a cara con el Arenteiro con la segunda plaza en juego. El 1-0 registrado en Carballiño con gol en propia meta de Mateo deja a los rojillos en la tercera posición, a cuatro puntos del Arenteiro y con el average particular perdido. A falta de ocho jornadas para el final de la temporada, tanto el capitán del Estradense Manuel González "Manuti como su entrenador, Javi Touriño, defienden sus opciones de pelear por esa segunda posición.

Manuti tiene claro que, a pesar de su tropiezo, todavía tienen opciones y recordó la temporada de su último ascenso a Tercera. "Se complicó pero esto no se acaba aquí. El año que ascendimos recuerdo que estuvimos en una situación similar. Perdimos contra el Choco y parecía que todo estaba acabado. A partir de ahí ganamos siete partidos de ocho y ascendimos", recordó. "El Arenteiro es un equipo al que le cuesta ganar fácil y puede fallar. Nosotros tenemos que mantenernos firmes en el objetivo de alcanzar el segundo puesto. Si empezamos a pensar en el tercero lo podemos perder. Hay que pensar en ganar lo que nos queda, especialmente los de casa", añadió en el mismo sentido.

El capitán rojillo también agradeció el apoyo que les está brindando la afición. "Había mucha gente en Carballiño y unos cien debían ser de A Estrada. Nos apoyaron en todo momento y eso es algo que notamos y que les tenemos que agradecer. Fue una pena no haber ganado porque la gente del pueblo se habría volcado todavía más con el equipo", manifestó.

En cuanto al partido contra el Arenteiro, afirmó que el Estradense cumplió con las premisas marcadas de inicio, no conceder pérdidas que permitiesen contras y frenar el juego aéreo. "El partido estaba bien trabajado y lo hicimos bien. Sabíamos sin embargo que si se ponían por delante iba a ser complicado y ese gol terminó llegando en una jugada desafortunada. A partir de ahí, ya no se jugó más. Amarillas, lesiones, faltas... Ellos hacen un juego en esos momentos del que debemos aprender".

Touriño por su parte reconoció que el partido ante el Arenteiro era "muy claro" para un empate sin goles. "Estaba claro que el que marcase el primer gol se lo iba a llevar, y así fue. A partir de ahí se echaron quince metros atrás y todo fueron faltas y parones. Ya no se jugó más".

"Ahora estamos a cuatro puntos del ascenso a falta de ocho jornadas. Es una situación que habríamos firmado antes de empezar", manifestó el técnico. "No nos podemos dar por vencidos. Hay que seguir luchando a tope", añadió al tiempo que pidió el apoyo de la afición rojilla en los próximos partidos. "Los necesitamos. El Arenteiro por ejemplo recibió un plus de sus aficionados, especialmente a la hora de presionar al árbitro. Eso es clave en estos momentos. Vamos a necesitar la ayudar de todos", añadió Touriño.