La Federación Gallega de Fútbol ha comunicado oficialmente al Bandeira que la próxima temporada militará en Segunda Autonómica. El equipo trasdezano iniciaba ayer los entrenamientos con el objetivo de pelear una temporada por un ascenso que ha llegado antes de pisar el campo. La meta del equipo dirigido por Toño González, pasará ahora a ser otra, intentar mantenerse en Segunda.

El técnico dezano explicó ayer que esta inesperada modificación de última hora se debe a la desaparición del San Marcos, equipo que tenía plaza en Segunda Autonómica. Esa desaparición hizo que se aplazase el sorteo del calendario, ya que se debía tomar la decisión sobre qué equipo ocuparía su puesto. Las dos opciones apuntaban a los dos equipos que la temporada pasada se quedaron sin ascenso en el fase final, el Bandeira, que cayó derrotado ante el Cogal Rodeiro, y el Bodegón Arzúa. Finalmente, el organismo federativo ha decidido que la plaza sea para los trasdezanos.

"Había dudas sobre si aceptar o no la plaza dentro del equipo pero finalmente se decidió dar el paso. Es mejor pelear por no bajar en Segunda que por subir desde Tercera", manifestó el entrenador dezano. El Bandeira tendrá ahora un difícil reto por delante, ya que se planificación estaba pensada para jugar en Tercera y con ese objetivo se creó un plantel amplio y joven. "Intentaremos hacer dos o tres fichajes más que nos aporten veteranía. Es más fácil que vengan jugadores para jugar en Segunda que para hacerlo en Tercera", añadió González.

De esta manera, el Bandeira regresa a una categoría en la que ya militó hace dos temporadas de manera fugaz y a la que anhelaba volver. En su nueva categoría se encontrará con un amplio número de equipos de la zona, entre ellos el vecino Lamela, Vilatuxe o Cogal Rodeiro.