El Estradense cerró ayer su cuarto refuerzo para la próxima temporada. Tras los fichajes de Makelele, Javier Astray y Adrián Beiroa, los rojillos han cerrado la incorporación de Pablo Rodríguez, un jugador que, al igual que Astray y Beiroa, llega procedente del Bertamiráns. El centrocampista de 25 años, nacido en el pueblo coruñés de O Barqueiro, seguirá de esta manera a las órdenes de Javi Touriño para embarcarse en un proyecto que alabó. "Todo el mundo me ha hablado muy bien del Estradense. Sé que están haciendo las cosas bien por parte de la directiva y que tienen muy buenas instalaciones. Entre eso y el proyecto tan atractivo que están haciendo no tuve que pensármelo mucho", manifestó ayer tras cerrar el acuerdo con los dirigentes del club rojillo.

El nuevo jugador del Estradense se formó en las categorías inferiores del Viveiro, equipo en el que dio el salto a Preferente. De allí se marchó al As Pontes y posteriormente al Narón, ambos en Tercera División. Tras pasar por el Galicia Mugardos de la Preferente Norte fichó el año pasado por el Bertamiráns, en donde podía compaginar bien sus estudios de Química en Santiago con el fútbol. Ahora inicia una nueva etapa en un equipo del que admite conocer poco en el plano deportivo, un desconocimiento también hace extensible a una Preferente Sur en la que nunca jugó. Pablo Rodríguez alabó sin embargo el equipo que se están creando y auguró que están capacitados para "luchar por cualquier cosa". El jugador de O Barqueiro llega para reforzar el juego de banda del Estradense, una de las prioridades. Puede actuar tanto por la derecha como por la izquierda a pierna cambiada.

Despedida de José Ramón

Por otra parte, el centrocampista José Ramón Garabal anunció ayer su marcha del Estradense. De esta manera el jugador compostelano pone punto y final a su tercera etapa en el club, todas ellas de tres años. El jugador reconoció ayer que su intención sigue siendo tomarse un tiempo de descanso del fútbol. "Yo no sé lo que voy a hacer y ellos tienen que buscarse la vida. Es normal. Me voy encantado con la directiva. Tienen todo mi respeto en ese sentido", manifestó. "No sé si voy a colgar las botas. También me llamaron de otro equipo pero ahora mismo solo quiero desconectar", añadió el jugador de 32 años.