La única incorporación por el momento a la directiva de Marcos Torres es José Luis Seixo, un hombre que la pasada temporada se encargó de la parcela deportiva. Tras confirmarse el cambio de directiva, Seixo ya trabaja en la confección del proyecto deportivo y, tal y como se esperaba, se seguirá apostando por la continuidad en el banquillo de Alberto Pereira Tamayo y su ayudante Brais Vila. En cuanto a la plantilla, está cerrada la continuidad de gran parte del plantel. Las bajas confirmadas son la del meta Michi y la del lateral Dani Reboredo, que se marcha a vivir a Londres. El joven Pitu se da por perdido en dirección al Silleda, mientras que Joaquín también tiene ofertas. En cuanto a los refuerzos, ya se negocia el regreso de Rucho.
Tamayo reconoció ayer que en los últimos días ya habían hablado con los jugadores para ir avanzando trabajo, con buenas respuestas por parte de muchos a pesar de tener ofertas de categorías superiores. Además, ya han hablado con la EF Lalín y también han analizado refuerzos, dando prioridad a los jugadores de la zona. A nivel personal, Tamayo se mostró contento de seguir en el Lalín. "Tener la oportunidad de devolver al Lalín a su sitio es un orgullo. Soy el entrenador que lo bajó a Primera. Ahora intentaré ser el que lo subió", afirmó al tiempo que reconoció que su única meta debe ser el ascenso.
