El Embutidos Lalinense Balonmán Lalín se impuso ayer al Magope Seis do Nadal-Coia en el duelo entre cuarto y quinto de la tabla que tuvo lugar en el Arena. Los de Paco Aguiar realizaron una primorosa primera parte, que finalizó con nueve goles de ventaja para los locales. La buena actuación de Durán bajo palos, el magnífico balance defensivo rojinegro, y un contragolpe letal completaron la receta de los de Lalín para apabullar a su rival antes del descanso. Un parcial de 5-0 terminó por destrozar a los de Coia en el tramo final de la primera media hora en medio del vendaval de buen juego protagonizado por los dezanos, donde Pachi volvió a ser el máximo artillero.

Sin embargo, la relajación y, sobre todo, el cambio táctico en defensa de los vigueses igualaron las fuerzas en el transcurso del segundo acto. La defensa 3-2-1 adelantada de los olívicos hizo mucho daño en un Embutidos Lalinense que apenas pudo reaccionar y que vio como a los 15 minutos de la reanudación su rival se ponía sólo a tiro de dos goles. Los rojinegros despertaron a tiempo para ampliar su renta en la recta final de la contienda con un parcial de 4-0, que volvió a poner las cosas en su sitio. Superado el atasco y la pájara, el Lalinense siguió aumentando las distancias en el electrónico del Arena aupado por su público hasta llegar a un marcador final que mantiene intactas sus opciones de auparse a la tercera plaza del Grupo A.

Paco Aguiar manifestó al término de la contienda que "es difícil pretender jugar los 60 minutos a la perfección" para explicar el bajón experimentado por los suyos en la segunda media hora de juego. El entrenador local también recordó que un partido "entre el cuarto y el quinto clasificados tiene que estar igualado, aunque pienso que fuimos mucho mejores en la primera parte, pero nos atascamos en la segunda porque ellos tenían que darlo todo". De todas formas, Aguiar señaló que había terminado "contento" con el rendimiento de los suyos delante de un Magope Seis do Nadal-Coia muy correoso.