Las bajas temperaturas ambientales y del agua deslucieron el arranque de la temporada de pesca en Ourense, donde miles de aficionados llenaron las orillas de los ríos desde primera hora de la mañana. Hay que destacar que hubo menos gente que en años anteriores. Con el agua a menos temperatura y demasiado clara por el viento, la trucha suele mostrarse más retraída y eso es lo que se vivió en la primera jornada de la temporada de pesca, en la que solo estaba permitida la pesca de la trucha. La temporada de salmón no comenzará hasta el 10 de mayo. Esta temporada de pesca se extenderá hasta el 31 de julio y se prorroga dos meses más, hasta el 30 de septiembre, en los casos de pesca sin muerte.

La jornada en la provincia de Ourense fue regular en cuanto a la captura de truchas y se notó sobre todo en la afluencia de pescadores, que cada año van bajando a los ríos Arenteiro, Avia o Miño, entre otros. A pesar del intenso frío y de que las previsiones de captura no eran demasiado optimistas, los ríos ourensanos tuvieron a sus fieles, que estaban deseando juntarse con sus amigos. Paco Muñoz, un aficionado ourensano, explicaba que pese a la discreta primera jornada "la campaña puede ser buena, pero lo que me extraña es la falta de licencias en relación a años anteriores, pues yo que estuve pescando por la zona de Alongos y apenas encontré pescadores, pues la gente llega un momento que se cansa y prefiere hacer otras cosas", indica. Agregó que "de todos modos, las orillas tenían que estar más limpias, porque he visto muchos vertidos al río, y algunas zonas son difíciles de transitar".

No obstante, este pescador ourensano se mostraba muy satisfecho pues por la mañana había capturado una trucha de 2,5 kilos, dos de 2 kilos, 1 de 1,5 y por la tarde se hacía con el botín de otras dos truchas un poco más pequeñas. Al preguntarle por la incidencia de la lluvia, Paco Muñoz indicaba que "las truchas que ya tenían pocas ganas de picar se ocultaron pero yo me doy por muy satisfecho. También por lo que me han comentado en el río Arenteiro, en el Avia o en Arnoia, las capturas han sido bastante aceptables, pero una de las cosas que se echa de menos es la poca repoblación que hay últimamente".