La goleada recibido el domingo en Ourense no amilana al técnico del Club Deportivo Lalín. Tamayo afirmó ayer que "ni voy a bajar los brazos, ni lo voy a dar por perdido hasta que matemáticamente estemos muertos porque lo fácil sería ahora venirse abajo". El técnico rojinegro tiene claro que "el equipo necesita fichar, pero no lo damos hecho por las razones que sean, y si a eso le añadimos que hay jugadores sin experiencia y el nivel para esta categoría, además de las bajas, no puedes competir". Tamayo considera que "debemos optimizar los recursos y rezar para que aparezca alguien" si el Lalín quiere mantener la categoría. Potenciar lo que hay y "arriesgar en un plan de trabajo específico, haciendo hincapié en el plano defensivo" son las actuales prioridades del entrenador de los del Cortizo.

Por otra parte, Tamayo también recordó ayer que "todo el mundo, desde la directiva hasta la plantilla, busca refuerzos para la plantilla", pero también se lamentó de las pretensiones de algunos de los futbolistas que en las últimas semanas pretendían formar parte del plantel rojinegro. "Hay jugadores que se creen que vienen de la Premier League, abren la boca en el plano económico y no puede ser, porque lo primero que se les dice es que vienen para jugar en el Lalín, algo que no todo el mundo lo puede decir". El máximo responsable del vestuario lalinista sigue estando confiado en poder sacar adelante a un equipo que tras la derrota en O Couto se aleja todavía más de la zona tranquila de la clasificación dentro del Grupo Sur. Por si esto fuera poco, Tamayo no podrá contar para el próximo compromiso liguero en casa con Suso, Albertito y Guille, por sanción, ni tampoco con el portero Michi, por motivos personales. "Ahora tenemos 13 jugadores para salir, así que tendrán que venir un central y portero de los juveniles para completar la convocatoria", explicó un resignado Tamayo.