La llegada de Tamayo al banquillo del Club Deportivo Lalín hará que los rojinegros "cambien" de casa por lo que resta de temporada. El mal estado que presenta el césped del Municipal provoca que el nuevo técnico lalinista esté decidido a entrenar y jugar en el Cortizo sintético por lo que resta de temporada. La gestora ya tiene decidido que el próximo partido como local de los dezanos se dispute sobre la hierba artificial, el próximo domingo día 20, frente al Arenteiro. La apuesta de fútbol combinativo del inquilino del banquillo lalinista no es negociable, y por eso es preferible entrenar y jugar sobre el caucho renovado de las instalaciones municipales que seguir sufriendo los vaivenes del vetusto campo de hierba natural lalinense.

El director deportivo del Lalín, José Seixo, confirmaba ayer la disputa del duelo con el Arenteiro en el Cortizo sintético y, también, su intención de entrevistarse hoy mismo con el técnico municipal Julio Couto para "tratar el cambio al campo de hierba sintético" para coordinar, sobre todo, los horarios de los entrenamientos. Preguntado sobre la coincidencia de que el campo de hierba artificial se tenga que compartir con, entre otros, la Escola de Fútbol Lalín, Seixo indicó que "con la escuela no va a haber ningún problema porque ellos tienen siempre las tardes de los domingos libres". El Lalín tampoco tendrá ningún inconveniente con la federación para trasladar sus encuentros oficiales a la nueva ubicación porque, tal y como señaló Seixo, "tú lo único que tienes que hacer es especificarle a tu rival, los martes antes del mediodía, dónde y cuándo se va a jugar el partido".

Así las cosas, la intención del cuerpo técnico y la gestora del Lalín es que la primera plantilla entrene y juegue a partir de la próxima semana en el Cortizo sintético, aunque lo que resta de esta y, por lo tanto, la preparación para su próximo compromiso liguera se llevará a cabo sobre el césped natural. Seixo se mostraba ayer convencido de que el entendimiento sea absoluto con los técnicos deportivos municipales para conseguir que el primer equipo se haga con un hueco en la programación del anexo del Municipal para sus trabajos semanales y, también, para los encuentros que le restan por disputar como local. La nueva filosofía de juego que quiere imponer Tamayo necesita de una superficie como la del remozado campo de fútbol lalinense, así que la gestora del Lalín no ha dudado en ponerse manos a la obra para acelerar el traslado. Por último, en el Lalín siguen probando jugadores que podrían engrosar la nómina de jugadores en el presente campeonato liguero.