El entrenador del Lalín, Francis Sixto, vivirá hoy su primer derbi de rivalidad con el Estradense. El técnico llega a este partido en una situación de necesidad tras una mala racha de cuatro derrotas y un empate en las últimas cinco jornadas. Estos malos resultados han mandado a los rojinegros a la penúltima posición de la clasificación con solo nueve puntos. Están además a cuatro del primer equipo fuera del descenso directo, el Domaio, y lejos todavía de los veinte puntos que los equipos implicados en la lucha por el descenso se suelen marcar como objetivo en la primera vuelta. En este punto aparece ante ellos la posibilidad de dar un golpe sobre la mesa ante el vecino y gran rival. Ambos están luchando por el momento en polos opuestos de la clasificación pero los rojinegros saben que vencer les daría un empujón en la clasificación y al mismo tiempo sería un refuerzo anímico.

Francis reconoció que su equipo afronta las horas previas al encuentro con "tranquilidad", aunque deseando que arranque. El técnico apostó por trasladar la presión a los estradenses, remarcando que su equipo tiene mucho que ganar pero poco que perder. "Ellos tienen más necesidades que nosotros. Sabíamos que nos iba a costar y que íbamos a estar abajo. Ellos sin embargo, si no suben a Tercera División después de cuatro años de este proyecto creo que sería un fracaso. Nosotros no tenemos nada que perder pero ellos sí. Todas las quinielas nos dan como perdedores de este partido, veremos lo que pasa", manifestó.

El entrenador del Lalín se mostró además muy confiado en las posibilidades de su equipo en este derbi de rivalidad. "Vamos a atacar tanto o más que ellos. Meteremos la misma presión. Estoy esperando a ver como atacan tanto como dicen porque creo que vamos a ser superiores a ellos. Jugamos en casa y saldremos a por todas. Aunque es un derbi venido a menos estamos hablando de dos clubes históricos y no nos vamos a quedar atrás. Creo que se verá un partido bonito e intenso", sentenció. Para Francis, el partido ante el Estradense es una buena ocasión para terminar con el "maleficio" que arrastran por su falta de gol.

Los rojinegros han convocado para este partido a 19 jugadores, ya que cuentan con dos jugadores tocados cuya participación está en el aire. Uno de ellos es su máximo goleador, el hondureño Jemba. El otro es el extremo Brais. Su participación en este partido se decidirá horas antes y según su evolución física. El técnico aguarda también que la afición del Lalín acuda al campo para contrarrestar a los estradenses que se desplazarán hasta el Cortizo.