El Embutidos Lalinense Balonmán Lalín acabó ayer con su autoestima reforzada después de realizar un magnífico partido durante su visita al OAR Coruña. Los de Paco Aguiar acabaron con la imbatibilidad como locales de los de Pablo Aguirre a base de una gran concentración y el acierto en todas las fases del juego. Una defensa bien secundada por Durán bajo palos, y un juego vertiginoso en ataque dieron los dos puntos a los del Arena en la que fue su mejor actuación liguera hasta la fecha.
Los lalinistas salieron más enchufados que sus rivales a la pista de un polideportivo que, aunque presentaba un buen aspecto, estuvo muy lejos del lleno absoluto que preconizaba el entrenador local en la previa de la contienda. El Lalinense se puso por delante en el electrónico desde el primer minuto y no dejó de estarlo hasta el bocinazo final. Aguiar dio entrada a todos sus jugadores, excepción hecha de Toño, para imprimirle al encuentro un alto ritmo. El buen juego desplegado por los visitantes maniató al cuadro herculino que fue incapaz de reaccionar sin ni siquiera llegar a inquietar a los dezanos, a pesar de que Lozano fuera al final el máximo anotador de la contienda con una decena de goles.
La gran virtud del Lalinense, ayer en A Coruña, fue el mantener la intensidad incluso en la reanudación. Las cómodas ventajas de cuatro y cinco goles permitieron a los de Paco Aguiar saber nadar y guardar la ropa conforma avanzaban los minutos. En los últimos cinco, el Lalinense dio toda una lección de intensidad sobre la pista herculina con un marcador muy favorable. Gustavo fue el principal artillero visitante en un duelo donde también brillaron en esta faceta del juego hombres como Roberto Álvarez, Martín o Adrián Crespo.
