Superado el minuto 90 en San Martiño, Chechu, uno de los mejores del Arteixo durante el partido de ayer, desvió un centro desde la banda del Estudiantil. El balón terminó golpeando con fuerza el larguero de su propia portería. Fue una jugada que pudo dejar los tres puntos en A Estrada, una jugada que no habría hecho justicia a lo visto hasta ese momento.

El equipo que dirige Víctor Santos no fue el esperado. Los de San Martiño quisieron el balón pero perdieron la batalla física ante un rival que pareció tener una marcha más desde el ecuador de la contienda. El resultado de esta desventaja fue un partido de contrastes, con un Estudiantil ejerciendo de señor en su feudo durante la primera parte, y obligado a sufrir en la segunda. La actuación de Makelele y la falta de puntería visitante hicieron que el empate no se moviese en el marcador.

El partido dejó una bonita primera parte en la que los locales cumplieron con su papel de dominador y los visitantes buscaron sus opciones a la contra. La ocasión más clara en los primeros minutos fue para el delantero local Rial, que tiró por encima del larguero un balón franco dentro del área del Arteixo. Pocos minutos después llegaría el tanto de los visitantes, en una acción de calidad de Pesco en la frontal del área. El centrocampista aguantó el balón ante el acoso de dos rivales y culminó la jugada con un bonito pase entre líneas para que marcase Josito.

La respuesta del Estudiantil llegaría poco después. La jugada del empate se inició con un robo de Colón en la medular, quien avanzó metros y puso un balón a la banda para Rial. El pase de la muerte del delantero lo terminó empujando a la red Calderón. La primera parte moriría con un par de lanzamientos lejanos despejados por los porteros.

Tras el paso por vestuarios, el partido se puso de cara para el Arteixo. Los locales amagaron de inicio con una doble ocasión de Calderón a la que respondió Adrián pero fue un oasis en el mar visitante. Los cambios no sentaron bien a un Estudiantil ante un rival que terminó el partido mucho mejor, incluso a nivel físico. Con las líneas demasiado separadas, los de Víctor Santos señalaron los espacios por los que aguardaba pacientemente su rival. El resultado fue un goteo constante de ocasiones para el Arteixo, que se topó sin embargo con un acertado Makelele.

El meta estradense paró un disparo a bocajarro de Josito, antes de salir con acierto a los pies de Javi en un mano a mano. Poco después, desvió un potente disparo de Roberto que parecía dirigirse sin remedio hacia el fondo de la portería. A diez para el final, Makelele terminó por frustrar a los visitantes con una nueva parada de mérito, esta vez a disparo de Pesco. Con el Estudiantil pidiendo la hora llegaría la última ocasión. Chechu estrelló el balón en su larguero demostrando que, esta vez, el fútbol quiso ser justo con aquellos que mejor lo interpretaron.