Mientras en el seno de la directiva de la Escola de Fútbol Lalín se congratulan por el éxito conseguido en la quinta edición de su torneo internacional, en la retina de los aficionados que el pasado fin de semana estuvieron en el Cortizo todavía permanecen las evoluciones de algunos de los jugadores que participaron en él. Como ya es habitual, la competición lalinense premió a cinco de ellos en diferentes apartados. Un madridista, dos españolistas y otros tantos culés completaron el cuadro de honor.

El merengue Álex Herrero se llevó el trofeo al mejor portero tras una descollante actuación en el duelo con el Barça. Seguro por arriba y ágil en todas sus intervenciones, Herrero repitió en Lalín el premio conseguido en la Arousa Cup como "jugador más ideal". Los miembros del jurado no lo tuvieron fácil porque "todos los porteros eran muy buenos", aseguran.

El blaugrana Anssu fue el máximo goleador con media docena de dianas, cuatro a la EF Lalín. A pesar de no estar brillante en la primera jornada, anotó tanto en la semifinal como en la final haciendo valer su poderío físico siendo aún alevín.

El "perico" Dani Villahermosa fue elegido mejor jugador por ser el faro de su equipo durante todo el torneo. En la final firmó un gol de auténtico crack realizando una magnífica jugada personal. Su compañero Alejandro Pérez resultó el mejor defensa del torneo en dura pugna con el capitán del Madrid. Hizo el segundo gol de la final y se mostró seguro en el eje de la defensa.

Por último, Iván de la Peña fue el encargado de entregar el premio al jugador más espectacular, galardón que recayó en el japonés del Fútbol Club Barcelona, Take. La perla de la cantera culé mostró sus virtudes, sobre todo, en la primera jornada de la competición a base de fintas imposibles, regates increíbles y mucha calidad en el uno contra uno. Todos ellos fueron las caras visibles de una competición con un nivel muy alto de juego, donde el gusto por el balón y el buen toque fueron el denominador común durante los dos días del torneo.