El comité de competición de la delegación de Santiago de la Federación Gallega de Fútbol ha sancionado al jugador del Tabeirós José Manuel Pena Pintor, más conocido como "Galego", con cuatro años y seis meses. Se trata de una sanción pocas veces vista en el mundo del fútbol autonómico y está provocada por la agresión del jugador de A Estrada al árbitro del partido que enfrentó a su equipo con el Dubra B el pasado domingo. Además, la federación ha decidido imponer una multa al Tabeirós de 940 euros, una sanción que no ha sentado nada bien en el seno de la entidad.

La agresión por la que Galego ha recibido esta dura sanción se produjo en torno al minuto 70 de partido, cuando los visitantes ganaban por 3-4. En ese instante, un posible penalti en el área del Dubra motivó las protestas del jugador, que terminó viendo la segunda amarilla. Tras enfilar inicialmente el camino de los vestuarios, el jugador dio media vuelta y dio un puñetazo al colegiado, Alfonso Pérez, del colegio de Lalín, cuando este todavía estaba apuntando su expulsión en sus papeles. Tras suspender el choque, el trencilla fue trasladado al ambulatorio de A Estrada por el propio presidente del Tabeirós.

Desde el momento del incidente, desde el club tenían claro que Galego se enfrentaba a una dura sanción por parte de la federación. Sin embargo, sus previsiones no iban más allá de un año o dos como máximo de castigo. Estas previsiones coincidían con las sanciones aplicadas en otros casos similares. En esta ocasión sin embargo, el comité ha optado por una sanción muy larga con un carácter claramente ejemplar.

En cuanto al club, se decide que debe abonar una multa de 940 euros, además de asumir el coste de la reanudación del partido. Se concede para ellos un plazo de dos días a ambos equipos para que intenten llegar a un acuerdo en la fecha.

Cabe destacar además que Galego se enfrenta a una denuncia judicial interpuesta por el colegiado por esta acción.

La sanción respecto al partido del pasado domingo se une a la sanción del partido que enfrentó al Tabeirós con el Sigüeiro, por el cual la federación ha impuesto una multa de 90 euros al equipo estradense. En este partido, los de Nigoi solo pudieron contar con ocho jugadores y tuvo que ser suspendido al lesionarse dos. La federación considera que el Tabeirós no se presentó a dicho encuentro y lo sanciona por incomparecencia.

Ambas decisiones no han sentado bien en el club. Así lo reconoce su técnico, Zipi, quien calificó todas estas sanciones de "desproporcionadas". "En los últimos días estaba viendo que nos iban a dar por los dos lados y así fue. Es desmesurado. Hace tan solo unas semanas sancionaron con cinco partidos a un jugador por zarandear a un árbitro. Si le pegas sin embargo son cuatro años. No es algo justificable, pero no fue para tanto si el lunes ya estaba arbitrando en A Estrada. No se rompió nada", manifestó el técnico, quien sentenció que "dan ganas de dejarlo todo ahí".