El Embutidos Lalinense vio cortada su buena racha de resultados en su visita a la pista del Avilesina Cafés Toscaf. El encuentro estuvo condicionado por la situación en la que tuvo que viajar el equipo lalinense. Las bajas y los compromisos del equipo juvenil dejaron a Budi con solo nueve jugadores del primer equipo disponibles, entre ellos dos porteros. Estas restricciones obligaron a los rojinegros a realizar un ejercicio de supervivencia en el que terminaron logrando una buena nota pese a la derrota.

Desde el principio del partido se vio claro que el Embutidos afrontaba una carrera de fondo en la que tenía pocas opciones de salir victorioso. La falta de efectivos obligó a Budi a emplear al meta Durán como jugador de campo. En la primera parte dio respiro a sus compañeros en defensa. En la segunda incluso se quedó en acciones de ataque, logrando un gol.

En la primera parte, las fuerzas acompañaron a un Embutidos que se mantuvo siempre en el partido con una gran actitud defensiva. Tras la reanudación, los visitantes comenzaron a abrir brecha. Los rojinegros tuvieron la opción de volver a engancharse, aunque volvieron a ceder terreno en los instantes finales.

Tras el partido, Budi alabó el esfuerzo realizado por sus hombres en esta situación. "El problema fue el físico. Hicimos un gran esfuerzo y demostramos que estamos en la línea adecuada para lograr la salvación", explicó.