El pasado fin de semana se disputó en Antequera el Campeonato de España Juvenil de Pista Cubierta. En él se vieron las caras los mejores atletas españoles del momento, todos ellos en posesión de las mínimas de participación exigidas por la Real Federación Española de Atletismo en cada una de las distintas pruebas que se disputaron a lo largo del fin de semana. Entre ellos estuvo el atleta estradense, Miguel Otero Rey, esta temporada fichado por el Real Club Celta de Vigo Atletismo, quien firmó una gran actuación con un cuarto puesto.

Otero, inscrito para la prueba reina del atletismo español, los 1.500 metros lisos, logró superar las adversidades surgidas en estas últimas semanas de entrenamiento para traerse para casa un grato recuerdo.

Hasta un total de 42 atletas estaban inscritos para disputar la prueba, por lo que el pase a la final estaba muy caro. Finalmente solo confirmaron su asistencia 35, por lo que la organización del evento dividió a los deportistas en 4 semifinales. Lograrían el pase a la final los dos primeros de cada serie, así como las cuatro mejores marcas de todas ellas. Otero quedó encuadrado en la primera de las cuatro series, una serie muy igualada en cuanto a marcas.

Al no tener referencias de los demás por tener que correr en primer lugar, optó por una carrera rápida desde el inicio. Otero tomó el mando de la prueba desde el disparo de salida y no lo dejó hasta el final, corriendo de forma valiente, terminó la prueba con un crono de gran valor, teniendo en cuenta de la forma en la que se desarrolló, 4:06:75, una marca que se quedo a tan solo 60 centésimas del récord Gallego Juvenil que data ya del año 91.

En la final del domingo, cambió la estrategia, con una salida lenta, bien colocado y la espera de los movimientos de los demás. Si no se producían, atacaría a falta de 600 metros.

La carrera salió como esperaba, muy lenta y con los doce atletas corriendo muy juntos. El paso por los mil metros se realizó en 3:03, con muchos golpes y empujones. A partir de ese momento los atletas incrementaron el ritmo. A falta de dos vueltas ya solo eran cuatro los atletas que podían aspirar a las medallas, uno de ellos Otero. A pesar de que realizó un esfuerzo encomiable, la semifinal del día anterior pasó factura y la medalla se escapó por poco mas de 80 centésimas, teniendo que conformarse con el cuarto puesto.

Tras la carrera, su técnico Ángel Bugallo, reconoció que "se debe valorar enormemente, el poder decir que eres el segundo mejor atleta español, ya que el segundo y tercer clasificados, no tienen nacionalidad española, algo que muchos no entendemos".