la integrante del Kennel Den, Mónica Touriño, se quedó a las puertas de una medalla en el Mundial que se disputó el pasado fin de semana en la ciudad polaca de Kozle, donde participó acompañada de su perro Nepal. El circuito sobre el que se celebraba la competición estaba diseñado para ser muy rápido y poco técnico, pero las condiciones climatológicas lo convirtieron en un lodazal, en el que a los corredores les costaba encontrar un apoyo estable. Debido a esa circunstancia se redujo la distancia del canicross, recortando 700 de los 4.500 metros de carrera en Canicross.

La carrera se dividió en dos mangas. En la primera de ellas, Mónica Touriño consiguió clasificarse en la cuarta plaza, pero con tiempos muy ajustados, un puesto que supo mantener en la segunda manga. Pese a quedarse a las puertas de la medalla, Touriño se mostraba satisfecha por su estreno en un Mundial en el que superó a dos de las medallistas de la anterior edición, además de hacer los mejores tiempos personales en competición.

A pesar de las malas condiciones del circuito, las velocidades de los competidores fueron altísimas, como lo demuestran los tiempos de la vencedora femenina, que completó el recorrido con una media de 2.42 el kilómetro, mientras que Mónica Touriño lo hizo en 2:51. Su compañero en el Kennel Den, Óscar Piñeiro, también finalizó en la cuarta posición de la prueba masculina con un tiempo de 2:35 el kilómetro.