Cayó con contundencia el Calmear Rasoeiro en A Coruña ante el OAR, en un partido en el que les penalizó en exceso su bajo porcentaje de lanzamiento unido a las contras locales después de cada acción marrada.
Sucumbieron ya los grovenses en el primer cuarto, después de un testimonial 1-2 de los azulones en el arranque. Y es que a partir del minuto 6, en que caían por 5-3, los de Quito Parada encajaron un parcial de 6-2 que llevó el electrónico en el minuto 14 a un 11-5 que condicionaría ya el resto del choque. La renta local creció en el primer tiempo hasta una máxima de 8 (17-9) y se reducía a 6 al descanso (19-13).
En el arranque del segundo tiempo el Rasu enterró cualquier atisbo de reacción al encajar de salida un parcial de 4-0 que llevó el marcador a un 23-13 que finiquitaba en la práctica el choque. A partir de ahí, y con el partido resuelto en pro de los locales, los dos técnicos aprovecharon los minutos para dar minutos a todos los jugadores de banco, mientras la renta del OAR no bajó nunca de los ocho goles y se elevó a 11 en el 58, renta ésta que se mantuvo al final (36-25). Víctor Couceiro con 11 goles y Diego Martínez con 10, bien dirigidos desde el centro por Pedro Iglesias, fueron un auténtico quebradero de cabeza para los grovenses.
El Rasu, con una sola victoria en los 8 partidos disputados, entra así en puestos de descenso, con un punto más que el Porriño que es el farolillo rojo.
Triunfo del Asmubal
En Segunda Autonómica, la cara para el Asmubal Meaño que se encarama a la sexta plaza, pero en los mismos puntos que los cuatro que le preceden, incluido el Lavadores que es segundo. Lo hizo tras imponerse en Coirón al Moaña por 40-32 (21-17 al descanso). Buenas sensaciones de un plantel que parece ir claramente a más.
