La presencia de efectivos policiales en los campos arousanos de Tercera División fue más intensa de lo habitual. El motivo no fue otro que la amenaza de bomba que se propagó por las redes sociales fijando como su posible objetivo los partidos de Tercera División que se disputaron ayer en todo el territorio nacional.

En A Illa, en los alrededores del Salvador Otero, incluso algunos policías, todos ellos armados, solicitaron la identificación a algunas de las personas que se acercaron a ver el choque entre el Céltiga y el Boiro. En San Pedro también se hizo notar el refuerzo en la seguridad mientras que en A Lomba varios policías nacionales estuvieron en el estadio hasta el término del choque.

Afortunadamente no hubo que lamentar incidente de ningún tipo en los campos de Tercera División de toda España.