Tras su renovación como técnico del Céltiga, Edu Charlín anunció que habría cambio de ciclo y que eso implicaba que habría cambios muy importantes en gran parte de la plantilla. Así ha sido. El club comunicó el pasado viernes a Marcos Bermúdez, Marcos Rodríguez, Diego, Ramón y Hugo que no continuarán en el equipo la próxima campaña, bajas que se unen a las de Luis Alberto y Pablo Berros que han decidido colgar las botas y a la más que probable marcha de David Castro al Pontevedra después de haber cuajado una temporada espectacular como lateral izquierdo isleño. De él, Charlín apuntaba ayer que "dio un nivel muy alto durante toda la temporada, y es lógico que clubes de mayor categoría se fijasen en su trabajo".

El técnico isleño no descarta que el número de bajas, con respecto a la plantilla de la pasada campaña, se incremente en los próximos días, algo que dependerá de posibles ofertas de otros equipos o de las oportunidades que ofrezca el mercado.

No en vano, el Céltiga ha comenzado a moverse muy rápido para confeccionar, lo antes posible, un equipo de garantías, que trate de obtener la permanencia en la categoría lo antes posible y evitar el sufrimiento al que se vio sometido el club en la que acaba de finalizar, donde se acabó salvando gracias al ascenso del Deportivo B.

Charlín es el primero que reconoce que "el equipo debió haber conseguido la permanencia mucho antes, por eso no queremos que nos vuelva a suceder lo mismo". El técnico y la directiva están trabajando en la contratación de varios jugadores y podrían cerrar en breve varias incorporaciones que les permitan dar ese salto de calidad para luchar con garantías por la permanencia.