No pudo ser. La cesureña Camila Aldara Morison se quedó sin opciones de disputar la gran final de la Copa del Mundo K-2 500 al no superar el corte en la semifinal. La prueba, que se disputa en la localidad húngara de Szeged, resultó extremadamente competitiva. La integrante del Náutico de Pontecesures, que compartía embarcación con Laia Pelachs, consiguió clasificarse el viernes en la cuarta plaza de su serie, lo que le daba opciones de buscar la gran final, que se disputará hoy, en una semifinal muy igualada. Pese al esfuerzo, la joven y su compañera no consiguieron pasar de la séptima plaza en su serie, a tan solo siete segundos de las vencedoras, la pareja neozelandesa formada por Lisa Carrington y Caitlin Ryan.