El Umia dejó muy claro en la mañana de ayer que aún no ha dicho su última palabra en la pelea por una de las tres primeras plazas. Los de Pablo Torres sabían que no podían fallar ante un San Esteban inmerso en otras lides clasificatorias y, no solo cumplieron con la encomienda, sino que lo hicieron con una goleada sin paliativos.

Rubén Sánchez se convirtió en la punta de lanza de un Umia que salió lanzado a por los tres puntos ante un rival que trataba de defenderse, pero ni siquiera podía ante la superioridad de su rival. Y es que a los diez minutos la renta ya era de 2-0 con un Rubén desatado ofensivamente.

El San Esteban no era capaz ni de acercarse a la portería de Juanjo. Más que un partido era un monólogo absoluto. Solo necesitó 25 minutos Rubén Sánchez para firmar su hat-trick y Dani Domínguez haría el 4-0 antes de llegarse al descanso.

En la segunda parte, Nacho tomó el relevo en cuanto a protagonismo goleador anotando tres de los cuatro tantos siguientes. Rubén aprovechó también para hacer el cuarto en su cuenta. La guinda fue el derechazo a la escuadra con que Nacho cerró el partido.