El ambiente que generó la afición del Kemegal Cortegada en León fue una de las claves de la excelente fase de ascenso realizada por el equipo de Rubén Domínguez.

La jornada de ayer fue la que más número de personas vestidas de azul comparecieron para animar al equipo. Muchos vehículos particulares se desplazaron para apoyar al equipo en una cita histórica para el baloncesto arousano.

Tanto los aplaudidores como las bocinas atronaron desde primera hora de la tarde el el coliseo leonés. Tampoco faltaron los bombos para generar un ambiente espectacular que las jugadoras agradecieron enormemente desde la cancha.

A la conclusión del encuentro, y tras la desolación de la derrota, fueron muchísimas las niñas que bajaron a animar a sus jugadoras a la propia cancha en un gesto de total identidad con la ilusión que le había generado el equipo. Finalmente no pudo ser, pero esta afición ha demostrado que llevará al equipo de nuevo a la élite.